El tráfico en las grandes ciudades de España no para de crecer. Sobre todo en verano y fines de semana, las carreteras se saturan y los atascos se hacen inevitables. Esto preocupa mucho a la Dirección General de Tráfico (DGT) y al Ministerio de Transportes, que ya están buscando soluciones.
Además de medidas como prohibir viajar solo en algunas regiones, ahora han lanzado un proyecto piloto para probar una idea nueva que podría cambiar las cosas.
La medida consiste en permitir que los coches usen el arcén cuando el tráfico esté muy congestionado. Así, se libera un carril y el tráfico fluye mejor. Por ahora, esta prueba solo se aplicará en momentos puntuales y en un tramo concreto.
El experimento tendrá lugar en la autopista AP-4, entre los kilómetros 41,12 y 44,5, cerca de Las Cabezas de San Juan, en dirección Cádiz. Este tramo es clave para conectar con Lebrija, Sanlúcar de Barrameda y Trebujena, donde se forman atascos con frecuencia.
Según ha informado el medio 20 Minutos, esta medida está en fase de pruebas y aún necesita la aprobación oficial. Mientras tanto, el Ministerio ya ha adaptado el arcén para que sea seguro y adecuado para los coches. Esta técnica no es nueva en Europa; países como Alemania la usan con éxito, aumentando la capacidad de sus carreteras hasta un 25% sin comprometer la seguridad.
Si la prueba funciona bien, la DGT podría extenderla a más autopistas y en más momentos del año. Esto ayudaría a reducir atascos y también la contaminación causada por coches parados.
El Ministerio ya trabaja en adaptar otras vías para que el arcén pueda usarse de forma segura. Pero antes de expandir la medida, se estudiará que no se aumenten riesgos.
Esta iniciativa muestra que las autoridades quieren modernizar la gestión del tráfico y buscar soluciones reales para los conductores. Si todo va bien, pronto podríamos viajar más rápido y sin tanto estrés en nuestras carreteras.