La Junta de Castilla y León ha decretado la situación de ‘alerta’ por riesgo de incendios forestales en toda la Comunidad entre el 19 y el 22 de agosto, debido a unas condiciones meteorológicas extremadamente adversas. Además, ha activado el nivel de ‘alarma extrema‘ en las provincias de León, Zamora y Salamanca.
Según la Consejería de Medio Ambiente, la persistente sequía y el elevado estrés hídrico de la vegetación, junto con la virulencia de los incendios registrados en los últimos días, han obligado a reforzar las restricciones para proteger a la población y los bienes materiales.
Con esta declaración de ‘alerta‘, se intensifican las limitaciones al uso del fuego y a actividades que puedan generar chispas o deflagraciones, tanto en zonas de monte como en sus proximidades. Todas las autorizaciones previas para estas prácticas quedan suspendidas, según informa Europa Press.
En el caso de León, Zamora y Salamanca, donde se activa el nivel de ‘alarma extrema‘, se añaden medidas más severas. Entre ellas, la prohibición del uso de ahumadores en la apicultura, el veto a maquinaria que pueda provocar igniciones y la restricción al tránsito de personas y vehículos en montes, salvo para acceder a propiedades, realizar trabajos profesionales o en situaciones de emergencia.
La Consejería hace un llamamiento a la ciudadanía para extremar las precauciones en estos días críticos. Advierte de que cualquier imprudencia, por mínima que sea, puede desencadenar un incendio con consecuencias graves para la población y el entorno natural.