Cáritas ha revelado que el 47% de las personas que atendió en España durante 2024 son migrantes en situación administrativa irregular. Esto equivale a unas 550.000 personas, una cifra que no ha dejado de aumentar desde el año 2019.
Así lo refleja la Memoria Confederal, en la que se detalla que la organización invirtió un total de 486,9 millones de euros en 2024 para acompañar a más de 2,1 millones de personas tanto dentro como fuera del país.
Esta cantidad supone un ligero aumento de 469.084 euros (un 0,10%) respecto al año anterior, y ha sido destinada a distintos recursos y proyectos sociales en España, así como a programas de cooperación internacional.
Gracias a estos fondos, Cáritas pudo atender a 2.185.004 personas en total: 1.178.346 dentro de España y 1.006.658 a través de acciones de Cooperación Internacional.
Durante el año pasado, cerca de la mitad de las personas apoyadas por las más de 4.933 Cáritas parroquiales eran trabajadores con bajos ingresos o personas con graves dificultades para acceder o mantener una vivienda. En el área de Acogida y Asistencia, el 80% de las ayudas solicitadas estuvieron relacionadas con necesidades básicas como el pago del alquiler o de suministros del hogar.
La organización destaca que desde hace años es una de las pocas entidades que acoge a personas migrantes en situación irregular, muchas de ellas derivadas desde el sistema de acogida de emergencia, cuya cobertura es limitada, o personas que, tras llegar por vías legales, han quedado en situación administrativa irregular por la expiración de visados o el rechazo de solicitudes de asilo.
La labor de Cáritas con personas migrantes y refugiadas abarca desde la primera acogida hasta el acceso a derechos básicos, recursos y servicios fundamentales, todo ello con el objetivo de favorecer su integración real en la sociedad.
Estos procesos no son inmediatos: suelen extenderse entre uno y dos años, y requieren un acompañamiento integral, adaptado a cada persona y a su situación concreta.