El jefe de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) de la Policía Nacional, detenido por Asuntos Internos el pasado martes, compareció junto a otros cinco sospechosos ante el titular del Juzgado de Instrucción Número 7 de Murcia.
Asimismo, la investigación se centra en sus presuntos vínculos con narcotraficantes, y se examina también la posibilidad de que haya incurrido en corrupción policial, según informa el medio la opinión de Murcia.
La operación, que ha estado en marcha desde el verano, incluyó llamadas telefónicas autorizadas por el juez, revelando las presuntas irregularidades cometidas por el inspector. También se informó que el agente quedó en prisión provisional, según fuentes judiciales.
La investigación, que llevaba meses gestándose, se intensificó esta semana con la intervención de Asuntos Internos, quienes se desplazaron desde Madrid hasta la Región para proceder al arresto del identificado también como J.G.
En ese mismo orden, se sospecha que el policial habría aprovechado su posición en el departamento antidroga para establecer contactos ilícitos y realizar negocios con individuos a los que debía perseguir.
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) informó este jueves al mediodía que se habían llevado a cabo «varias entradas y registros en los partidos judiciales de Murcia, Molina de Segura y San Javier, en el marco de un procedimiento judicial declarado secreto en el que se investigan actividades relacionadas con el tráfico de drogas».
En este contexto, fuentes cercanas al caso detallaron que uno de los registros se llevó a cabo en la residencia del inspector J.G. Según estas fuentes, entre los detenidos se encuentran familiares de este alto cargo policial y un empresario de la Región de Murcia.
Los investigadores también realizaron pesquisas en dependencias policiales, específicamente en las ubicadas en Sangonera, donde la Udyco tiene sus oficinas, en busca de posibles pruebas que pudieran demostrar la implicación del jefe de la unidad.
«Según se informó al instructor se practicaron varias detenciones en la Región y en Madrid, entre ellos un miembro de la Policía Nacional en Murcia. Está previsto que se les tome declaración», afirmó el TSJ en su comunicado oficial al mediodía.
J.G. salió de los calabozos después de pasar dos noches y se trasladó a las instalaciones de la Ciudad de la Justicia de Murcia, donde el juez a cargo de la causa y la fiscal delegada Antidroga lo estaban esperando.
Cabe destacar que hace una década, el inspector ahora bajo sospecha recibió la Cruz al Mérito Policial con distintivo rojo por su labor en una destacada investigación de drogas desarrollada en Cartagena, donde estaba destinado en ese momento.
En concreto, ocupaba el cargo de jefe de la Udyco en la Comisaría de la ciudad portuaria. La unidad que dirigía estuvo particularmente activa ese año en la lucha contra la entrada de sustancias estupefacientes a través del puerto. J.G. recibió esta distinción en un acto celebrado en Belluga con motivo de los patronos del cuerpo, los Santos Ángeles Custodios, en 2014.