Una pareja iba a vivir una gran oportunidad, la de reencontrarse frente a El espejo de La isla de las tentaciones 9. Con ello llegaba uno de los momentazos de la edición, el cara a cara entre Almudena y Darío tras todo lo ocurrido en sus villas y el profundo dolor que siente ella al verle avanzar con Cristina.
Después de que las chicas decidieran que Almudena era la elegida para encontrarse con Darío, Sandra Barneda se lo comunicó a él. Presentadora y participante llegaron juntos frente a El espejo, donde Darío confesó cómo se encontraba antes de ver a su pareja:
“Estoy bastante nervioso, impone mucho esto. La veo y sé cómo se siente. Creo que la voy a ver con dudas y voy a intentar decirle lo que siento a través de aquí”
Según recoge Telecinco, Sandra Barneda le recordó las normas, que también explicaría a Almudena:
“Va a durar tres minutos, no podéis tocaros ni cruzar el espejo, no podéis hablar, podéis utilizar la mirada, los gestos, pero no palabras. Saltarse las normas sí que tendría consecuencias muy graves”
Llegó la hora de la verdad. Almudena corrió por la playa a toda velocidad para llegar cuanto antes frente a El espejo. Golpeó inmediatamente la superficie que los separaba y gritó fuera de sí: “Eres un hijo de p, me has roto el corazón”.
La presentadora le recordó en varias ocasiones que “no puede hablar”, pero Almudena continuó expresando a gritos lo que sentía:
“Eres un desgraciado, mi padre tenía razón. Te odio, eres un cerdo, me estás perdiendo”
Darío reaccionó a sus ataques y también le reprochó lo que había visto sobre ella: “Me estás mosqueando. A ti te han chupado y te han comido entera”. Sandra insistió: “Solo gestos y miradas, por favor”.
En medio de la tensión, Almudena cogió un coco de la arena y lo lanzó contra el espejo, pese a que la presentadora intentó impedírselo, lo que enfadó aún más a Darío. Ella continuó recordándole “el cojín que se ha puesto en la cara, el beso que yo lo vea”, en referencia a sus momentos con Cristina. Cogió otro coco y lo lanzó de nuevo, golpeando esta vez a la presentadora. Almudena pidió perdón de inmediato, pero Sandra advirtió que “esto iba a tener consecuencias”.
En los últimos instantes del encuentro, Almudena lanzó una pregunta directa: ”¿Estás conmigo por estar? Me tienes harta”.
Darío, visiblemente enfadado, reaccionó mientras la presentadora pedía a ambos que se retiraran. Almudena terminó tirada en la arena entre gritos:
“Te tenía en un pedestal, me has roto el corazón, cerdo de mierd, y yo te he respetado en todo momento”
Mientras Darío se alejaba gritando y en muy mal estado, acabó corriendo hacia donde se encontraba Almudena. Sandra Barneda logró impedir que se juntaran, pero sí hubo un cruce final de reproches:
“La he dejado gritar y no me escucha. Mírame a los ojos y me verás. Vergüenza es lo que me das, has desaprovechado la oportunidad”
Almudena le preguntó:
“¿Quieres explicarme qué te ha pasado? Tenías la oportunidad de mirarle, ¿dónde ha quedado el amor?”
Darío siguió alejándose por la playa hasta tirarse en la arena. Al verlo, ella corrió desconsolada hacia él mientras la presentadora intentaba evitarlo. El desenlace se conocerá en la continuación del final de El espejo en el próximo programa de La isla de las tentaciones.
Cuando Sandra Barneda entró en Villa Playa, comunicó a las chicas que una de ellas tendría “la oportunidad de ver a su novio” a través de El espejo:
“No vais a poder cruzar una palabra, pero cualquier gesto o una mirada os puede dar muchas respuestas. Este privilegio solo puede disfrutarlo una de vosotras y tenéis que poneros de acuerdo”
No hubo dudas: todas coincidieron en que debía ser Almudena, porque “es a la que mejor le va a venir”. Ella se emocionó: “Siento que al mirarle a los ojos voy a tener muchas respuestas”.
Más tarde, Sandra Barneda comunicó la noticia en Villa Montaña: “Hoy uno de vosotros va a poder ver a su novia”. Los chicos creyeron que podían decidir quién sería, y dieron sus opiniones sobre quién lo necesitaba más. Sin embargo, la presentadora aclaró que la decisión ya estaba tomada por las chicas: “El que va a poder reencontrarse con su pareja es… Darío”.
Él reaccionó con nervios y alegría:
“Estoy bien, tengo ganas, pero estoy nervioso porque voy a ver la mirada que me va a echar que voy a entender”
Se preparó y partió con la presentadora sin imaginar lo que estaba a punto de vivir.