Mientras Bertín se refugia en su finca de Sevilla y evita dar la cara tras las declaraciones de su ex, sus hijas no han dudado en cerrar filas en torno a él
Después de 20 días de convertirse en madre, y ante la falta de noticias de Bertín Osborne, Gabriela Guillén dio un paso al frente. Tras rechazar numerosas ofertas para contar su versión sobre su relación con el artista, se sentó en el plató de ¡De viernes! para revelar la verdadera cara del que sostiene que es el padre de su hijo.
Por eso, y aunque el presentador no se ha puesto en contacto con ella para someter al bebé a las pruebas de paternidad para comprobar si es suyo -de ser así se haría cargo económicamente del niño aunque ya ha dejado claro que no quiere volver a ser padre ni ejercer como tal-, la fisioterapeuta paraguaya ha anunciado que sus abogados ya han iniciado con los trámites para hacer la prueba de ADN. Sin duda, el gran titular que dejó su entrevista en el programa de Telecinco.
Mientras Bertín se refugia en su finca de Sevilla y evita dar la cara tras las declaraciones de Gabriela, sus hijas no han dudado en cerrar filas en torno a él. Y después de que Eugenia Osborne haya asegurado que no piensa hablar sobre la que podría ser la madre de su nuevo hermanito, Alejandra Osborne se ha pronunciado con rotundidad sobre el testimonio de la examiga especial de su padre.
“No voy a hablar porque no quiero” ha dejado claro, reconociendo con una sonrisa que a ella no le ha sorprendido para nada que la paraguaya se haya sentado finalmente en un plató: “No, no me he quedado flipada”. “Pero no voy a hablar” ha insistido, sin aclarar si es cierto que Bertín trataba a Gabriela como su novia y la ‘mujer de la casa’, ni qué le parece que haya sido la modelo la que haya comenzado el proceso para hacerle las pruebas de paternidad al bebé.