Hoy: 23 de noviembre de 2024
Es el runrún de la calle y de un colectivo de gente mayor que han vivido mucho, algunos dicen que demasiado. Muchos creen que los progresistas se adelantan a los tiempos y avanzan en soluciones para hacernos la vida mas fácil y comoda cuidando nuestro desarrollo fisico y mental.
Y en cuestión de cultura, muchos opinan que hasta ahora eran los auténticos guardianes de hacer partícipes del conocimiento a todos.
Esto te lo comentan mayores ya abuelos, que han vivido mucho: ellos si tienen el poder de comparar el ayer y el hoy, son esas personas hoy llamadas inútiles por algunos, y por otros los invisibles. Lo dicen unos descerebrados sin ningun ápice de empatía ni humanidad y que además añaden que son una carga para el país y la coletilla final es, que afean el paisaje, dicho en modo jocoso, y se lo creen, como si se tratase de una verdad absoluta.
Estos patéticos comentarios se están implantando en las mentes de demasiados jóvenes, todo por la vacía mentalidad de su única dedicación que es el culto al cuerpo y querer ser influencer, y que las únicas respuestas a sus mayores son, esto es mío, me lo debes, yo no pedi nacer, etc… Pues sí, esas personas mayores te dicen que vamos hacia atrás como los cangrejos, y con imposición, por unas normas de antaño que creíamos ya obsoletas.
Os aconsejo ir por los pueblos, esos que llaman “vaciados” y buscar como si de un tesoro se tratase cualquier utensilio de otro tiempo, aunque no sepáis para qué sirve, siempre encontraréis alguna persona, de esos mal llamados invisibles que os demostrarán como emplearlo, pues ellos los usaron.
Todo esto que nos venden como bueno es una falacia, tenemos que ser valientes y exponer alto y claro nuestros propios criterios, sin freno ni miedo. Aunque parezca que es el momento de algunos que se llaman progresistas, la razón es de nuestro propio tiempo, el de los ciudadanos de este país.
Somos respetuosos y aceptaremos todo lo que se ajuste a la legalidad aunque no estemos de acuerdo con esas doctrinas, todo por intentar vivir en paz, que en verdad es lo más importante para la gran mayoría.
No nos vendamos a falsos progresos que no valen para crecer, todo lo contrario, nos hacen colocarnos a la cola del auténtico crecimiento de una nación de estos tiempos. Recordad que en 1815 Napoleón fue derrotado en la batalla de Waterloo.
Después de veintitrés años de guerra, y fue el fin del imperio francés. Nombro Waterloo, por ser donde vive ese señor que salió de este país, escondido, para no ser juzgado, que se siente muy orgulloso de sus actos, que no se siente en absoluto español y que le rinden pleitesía otros españoles, que reniegan de serlo, esos que tienen la desgracia de haber nacido aquí.
A gente que huye del castigo dejando en barbecho a los que le siguieron, se les llama cobardes; hoy se pretende pactar con ellos. Muchos no querríamos individuos así para que nos representase en nada, no son de fiar, pero algunos por medrar son capaces de comulgar con ruedas de molino, caiga quien caiga.
Es simplemente una amalgama de comentarios de personas de la calle, que lee, se informa y que está al día. Siempre. ¿Nos merecemos lo que tenemos? La respuesta está en nosotros.
Yo creo que este tipo de personajes los ha habido en casi todas las épocas, mirando a los mayores como si fueran atrasados, ñoños o como si no nos importara nada. No nos engañemos y seamos un poco más optimistas y más alegres, también hay quien nos valora e incluso piden consejo y también trabajando o haciendo lo que pueden para que no nos falte lo indispensable, aunque lo tienen difícil.
Lo que está pasando ahora,? pues… como es un circo y además inexplicable, para que opinar? Pero no nos olvidemos a este payaso lo han votado los españoles, una pena pero, así es
España es un país con mucho potencial pero no se le saca partido. Hay demasiada corrupción en todos los ámbitos y en parte todos nosotros merecemos lo que tenemos y porque? Porque tampoco somos transparentes con nosotros mismos, nos quejamos de la cúpula política pero no luchamos por cambiar las cosas, no salimos a la calle, no hacemos huelgas, no existe la presión social en este sentido, todos queremos la comodidad de sentirnos seguros, sin arriesgar nada y si se puede engañar al sistema para uno ganar mas, pues mucho mejor. Esa hipocresía que muchos no quieren admitir, es la que está condenando este país por su falta de visión, porque no sólo son ellos como dirigentes políticos los que lo hacen mal, sino también nosotros. Deberiamos buscar ser más justos con nuestro entorno y con nuestros semejantes, sino, así seguiremos hasta que pase algo que nos haga despertar y querer una sociedad más justa, que seamos capaces de ejercer presión en muchos temas de los cuales ahora solamente nos quejamos, desde el comodo sofá de nuestras casas. Está democracia no toma en serio a sus ciudadanos, y no digo que tengamos que decidirlo todo pero si que se tenga en cuenta la opinión de todos a la hora de hacer cambios importantes en este país.