La Princesa Leonor y la Infanta Sofía han rechazado formalmente la parte del legado que les correspondía del empresario menorquín Juan Ignacio Balada Llabrés, y han decidido donar íntegramente su cuota a la Fundación Hesperia, impulsada por sus padres, los Reyes Felipe VI y Letizia. Con esta decisión, las hermanas renuncian también al histórico palacete Balada, situado en Ciutadella (Menorca), cuya propiedad pasa ahora a manos de sus primos.
El palacete formaba parte de la herencia que Balada dejó en 2009 a los entonces Príncipes de Asturias, a sus hijas y a los ocho nietos del Rey Juan Carlos. Desde 2010, los actuales Reyes renunciaron a cualquier beneficio hasta que Leonor y Sofía alcanzaran la mayoría de edad, momento en el que debían decidir qué hacer con su parte. Con la mayoría de edad ya cumplida por la Infanta Sofía, ambas han podido resolver su posición de forma definitiva.
La elección de las hermanas ha sido clara: renunciar por completo a los derechos sobre el inmueble y cualquier otro bien ligado al legado. Según fuentes oficiales, las hijas de los Reyes seguirán la misma línea de actuación que sus padres, destinando todo el patrimonio recibido a la Fundación Hesperia, reafirmando así su propósito de no obtener beneficios personales procedentes de esta herencia privada.
Tras la renuncia de Leonor y Sofía, la propiedad del palacete queda ahora en manos de los hijos de las Infantas Elena y Cristina, quienes deberán decidir qué uso darle. El Ayuntamiento de Ciutadella lleva años mostrando interés en poner el edificio al servicio de la comunidad con fines sociales o culturales y confía en que la nueva situación facilite finalmente ese uso público.
Además del palacete, la renuncia de las hermanas afecta a otros activos incluidos en el legado, como participaciones financieras y depósitos bancarios. Aunque no se han revelado cifras, la Casa Real ha confirmado que Leonor y Sofía también han cedido íntegramente su parte económica a la Fundación Hesperia, reforzando su apuesta por la transparencia y el compromiso institucional.