Hoy: 8 de noviembre de 2024
La pandemia de COVID-19 expuso un fenómeno que tomó a muchos por sorpresa: la proliferación de noticias falsas en redes sociales y la falta de información científica confiable, una combinación que alimentó la desconfianza hacia las vacunas y la expansión de teorías conspirativas, según Diario Libre.
Durante la primera Conferencia Latinoamericana de Vacunología, el tema de la educación médica en vacunación fue discutido ampliamente. En este contexto, el Dr. Eddy Pérez Then, moderador del panel “Vacunología en la educación médica”, destacó dos términos que han definido la campaña de vacunación: infodemia e infoxicación. Estos conceptos reflejan cómo el exceso de información ha dificultado el acceso a datos verídicos en medio de la emergencia sanitaria.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en su informe Entender la infodemia y la desinformación en la lucha contra la COVID-19, define la infodemia como “una cantidad excesiva de información (a veces correcta, otras veces incorrecta) que dificulta que las personas encuentren fuentes confiables y orientación fidedigna cuando las necesitan”. La OMS enfatiza que en la era digital, este fenómeno se amplifica por la velocidad y alcance de las redes sociales, que permiten que rumores y manipulaciones de la verdad se propaguen como un virus.
En paralelo, el término infoxicación describe la carga de información que enfrentamos a diario, especialmente desde la masificación del internet y las redes sociales. Esta saturación informativa, según expertos, no solo causa agotamiento mental, sino que también genera confusión y promueve la aparición de enfermedades que estaban bajo control debido a la pérdida de confianza en las vacunas.
“Enfermedades previamente controladas están resurgiendo porque muchos pacientes no actualizan sus calendarios de vacunación debido a la desconfianza en los biológicos”, advirtió el Dr. Pérez Then. Para combatir esta crisis, el especialista subraya la importancia de una educación continua y la presentación de estudios avalados científicamente que demuestren los beneficios de las vacunas.
El Dr. José Brea del Castillo, presidente de la Sociedad Latinoamericana de Vacunología, señaló que la oposición a las vacunas es un fenómeno que ha existido desde hace décadas, aunque hoy en día encuentra en las redes sociales un amplificador poderoso. “Es un problema de Antropología, Sociología y Patología”, afirmó Brea del Castillo, enfatizando que siempre habrá personas que duden, pero es fundamental educarlas y aclarar sus inquietudes.
La vacunación, explicó el experto, ha sido una de las herramientas más efectivas en la historia de la medicina para mejorar la calidad y esperanza de vida. De acuerdo con el Ministerio de Salud, por cada dólar invertido en vacunas, se recuperan 54 en beneficios para la salud, habiendo prevenido 154 millones de muertes en los últimos 50 años. Sin ellas, el retorno a la vida pública que hoy disfrutamos, como reuniones en aeropuertos o eventos masivos, no habría sido posible.
Para la decana de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), María José Fernández, esta problemática tiene sus raíces en la falta de información confiable y la abundancia de datos incorrectos que saturan a los usuarios. Fernández apuntó que ni siquiera las investigaciones sobre el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) generaron tanto revuelo como el que se ha visto durante la pandemia actual, en parte porque entonces no existían las redes sociales.