Hoy: 10 de noviembre de 2024
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se unirá al boicot de algunos gobiernos europeos y no enviará comisarios a las reuniones informales que se celebren en Hungría durante su presidencia semestral del Consejo de la UE. Este castigo es una respuesta al desafío del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, quien viajó inesperadamente a Moscú, en contra de la postura unánime de la UE de apoyo a Ucrania.
“A la luz de los recientes acontecimientos que han marcado el inicio de la presidencia húngara, la presidenta ha decidido que la Comisión estará representada sólo a nivel de altos funcionarios en las reuniones informales del Consejo“, ha anunciado el portavoz de Von der Leyen, Eric Mamer.
Además, la tradicional visita del Colegio de Comisarios que marca el inicio de cada presidencia rotatoria y que, en este caso, quedó relegada a septiembre, “no tendrá lugar”.
El anuncio se produce días después de que Suecia anunciara que sus ministros, en forma de protesta, no asistirán a las reuniones informales y de que otros socios como Finlandia, Estonia, Letonia y Polonia indican que estudian sumarse al boicot.
El boicot a la presidencia húngara es una medida sin precedentes en la historia de la UE y refleja la creciente preocupación por la situación política en Hungría. La UE ha estado presionando a Hungría para que cambie su política y respete los valores democráticos.