Will Smith ha vuelto a confesar uno de esos secretos que, por más que pase el tiempo, duelen. Esta semana, en una entrevista con el canal Big Rakoon, el actor reconoció que rechazó protagonizar El Origen, la aclamada cinta de Christopher Nolan, simplemente porque “no entendió” el guion.
“Creo que nunca lo había dicho públicamente. Chris Nolan me ofreció El Origen primero… y no la entendí”, relató con la franqueza de quien se sabe ya parte del meme, según una información publicada en El Diario de Chihuahua.
El Origen se convirtió en una de las películas más influyentes del siglo XXI: recaudó cerca de 900 millones de dólares, ganó cuatro premios Óscar, y consolidó a Leonardo DiCaprio como uno de los actores más serios y rentables del mundo.
Smith, mientras tanto, optó por protagonizar títulos como Siete Almas, Hombres de Negro 3 y Después de la Tierra, tres apuestas con poca fortuna tanto en taquilla como ante la crítica.
Pero este no fue su primer “no” a una joya del cine moderno. Will Smith también se negó a protagonizar Matrix cuando las entonces hermanas Wachowski lo convocaron. ¿La razón? Otra vez: no entendió el concepto. Prefirió filmar Wild Wild West, una superproducción que naufragó en todos los sentidos.
En palabras del propio Smith: “Hay algo en esas películas de realidades alternativas… no funcionan cuando te las explican. Pero sí me duelen esas dos cintas”.
Tampoco se quedó con Django sin cadenas. Quentin Tarantino escribió el papel pensando expresamente en él, pero Smith se bajó del tren: no le convencía la violencia del filme ni el hecho de que, en su opinión, Django no fuera realmente el protagonista. El papel terminó en manos de Jamie Foxx y el resto, como se dice, es historia del cine.
Will Smith no necesita presentación: ha sido ídolo mundial, héroe de acción, comediante de culto y hasta ganador del Óscar. Pero también es, cada vez más, el actor que estuvo a punto de protagonizar tres de las películas más revolucionarias de las últimas décadas… y las dejó pasar.
Rechazar un papel es parte del juego en Hollywood, sí. Pero cuando los rechazos forman una trilogía de oro (Matrix, El Origen, Django), la historia cambia. No es que no supiera actuarlas. Es que no supo verlas venir.