La delegada del Gobierno felicita a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por su trabajo
Valencia, a través de la delegada del Gobierno de la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, ha mostrado su satisfacción por la detención de los integrantes de una banda que perpetraba violentos robos y asaltos a ancianos en los últimos meses en varias pedanías y localidades de la ciudad.
Bernabé también ha asegurado que, tras los arrestos practicados por la Guardia Civil por fin “los vecinos pueden dormir tranquilos”. “Hoy es un día de celebración”, ha expresado la delegada del Gobierno.
La funcionaria valenciana ha visitado, horas después de que la Benemérita arrestara a cuatro hombres de edades comprendidas entre los 57 y 16 años como presuntos autores de estos hechos, la pedanía de Castellar-L’Oliveral, donde ha mantenido un encuentro con las asociaciones de vecinos en el centro cívico.
En declaraciones a los medios, la delegada del Gobierno ha felicitado a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por su trabajo, que ha destacado que ha sido “muy minucioso y costoso”, en el marco de un “gran dispositivo” en los pueblos del sur de València que “ha hecho efecto”, dado que los presuntos delincuentes “tuvieron que salir de aquí y fueran a otro lugar”. “Y eso es, probablemente, lo que hizo que la Guardia Civil les pudiera detener”, ha apuntado.
Bernabé ha precisado que de los cuatro hombres detenidos, dos de ellos son menores de edad. También precisa que pasaron a disposición judicial este mismo sábado, mientras que los otros dos lo harán “previsiblemente” el lunes. La investigación está dirigida desde el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Sueca (Valencia), que ha declarado secretas las diligencias judiciales.
Los delitos cometidos, según informó este viernes la Guardia Civil, se enmarcan dentro de un modus operandi “muy específico” que seguían los asaltantes: elegían a las víctimas vulnerables por sus características –personas de avanzada edad y en algunos casos residiendo en solitario– y realizaban el asalto al domicilio a altas horas de la madrugada. Así, “lejos de ser un hándicap”, la vulnerabilidad de las víctimas era “la característica buscada” para llevar a cabo estas acciones.