El cineasta Miguel Santesmases ofrece en su nueva película Tierra Baja, protagonizada por Aitana Sánchez Gijón, Goya de Honor 2025, una mirada «esperanzadora» frente a la España vaciada, en concreto sobre algunos municipios de Teruel, donde han rodado para alzar la voz porque «están en peligro de quedar deshabitados».
«La película tiene una mirada sobre estos lugares que no es desesperanzadora, al contrario se ve la esperanza y la belleza. Yo no quería hablar de la tristeza de los pueblos. Es una propuesta que es hermosa y con una mirada como valiente, desde luego crítica pero también positiva», afirma el realizador en una entrevista con Europa Press, con motivo del estreno en cines el próximo 31 de enero.
Santesmases asegura que Tierra Baja es un proyecto que trata de dar visibilidad a lugares que pueden quedar abandonados en el futuro, como Belmonte de San José o Alcañiz. «En toda esa zona yo he vivido cuando era niño y que tiene mucho que ver con mi pasado, con mi infancia. Me interesaba mucho tener la ocasión de inventarme una historia que ocurriera allí», explica.
La película propone el reencuentro entre Carmen (Aitana Sánchez-Gijón) y Eduardo, un viejo amor de su pasado interpretado por Pere Arquillué. «Me parece un argumento muy potente, pero necesitaba ponerla en pueblos donde casi no hay gente ni actividad económica», explica Santesmases.
El proyecto nació hace seis años, como desvela el cineasta, que afirma que la pandemia hizo que la película pudiera salir adelante. «Cuando empezaba esta película yo decía que esto es como atravesar la cordillera del Himalaya en transversal», reconoce.