En medio de los rumores de crisis, conviven distintas informaciones sobre un posible embarazo para la pareja
Tras unos últimos meses del año de lo más ‘viajeros’, Tamara Falcó e Íñigo Onieva regresan a España después de haber disfrutado de su última escapada de pareja a la nieve en la exclusiva estación de esquí suiza Gstaad.
Lejos de mostrar su felicidad a los cuatro vientos en su regreso a nuestro país, la pareja intentó evitar a los medios a toda costa llegando al aeropuerto de Madrid por puertas diferentes. Mientras la Marquesa de Griñón hacía su aparición por la zona Premium, íñigo Onieva se ‘mezclaba’ con el resto de pasajeros del vuelo para intentar pasar desapercibidos.
En medio de constantes rumores de crisis en la pareja que conviven con distintas informaciones sobre un posible embarazo en estos primeros meses del año, la pareja ha disfrutado de una escapada con amigos tras haber disfrutado de la Navidad en Miami junto al resto de la familia de Tamara Falcó.
Lejos de viajar ligero, Íñigo empujó por los pasillos interminables del aeropuerto un carrito cargado con hasta tres maletas de gran tamaño en las que llevaba todas sus pertenencias, pero también las de su mujer.
Tras su llegada por separado, la propia Tamara recogía a su marido a la salida del aeropuerto pero desde el interior de un coche con los cristales tintados para evitar que los fotógrafos captasen una imagen suya. Ante la insistencia, Tamara bajaba la ventanilla y felicitaba la Navidad a los medios con una sonrisa en el rostro demostrando que está feliz y ajena a todos los rumores sobre su matrimonio.