Cuando el sacerdote atravesó la puerta de la habitación donde agonizaba Marlene Dietrich, la moribunda usó la última fuerza que tenía para despacharlo con rabia: “No me distraiga. Tengo una cita inminente con su Jefe”. Los que tenemos por oficio ser mensajeros…
El mercado agroalimentario y artesanal, oportunidad para acercarse a la ciudad de Guadix y reencontrarse con la historia, el patrimonio y... los sabores…
La vivienda presentaba severas deficiencias para su bienestar. En la planta baja se improvisó un dormitorio, ya que el futbolista no podía subir escaleras…