El término nepo baby, cada vez más usado en medios y redes sociales, describe a los hijos de celebridades que han accedido a oportunidades privilegiadas en industrias como la moda, el cine o la música gracias a su linaje. Aunque muchas veces son cuestionados por beneficiarse del nepotismo, también enfrentan la presión de demostrar que su talento es genuino y no sólo heredado.
Figuras como Sofia Coppola, Kate Hudson o Dakota Johnson han construido carreras exitosas siguiendo los pasos de sus famosos padres. Pero hay otros nombres emergentes que están acaparando la atención, como Blue Ivy Carter, hija de Beyoncé y Jay-Z, quien ya ha ganado un Grammy y ostenta dos récords Guinness por sus logros artísticos a una edad muy temprana.
Modelos como Kaia Gerber, hija de Cindy Crawford, y Hailey Bieber, heredera del clan Baldwin, se han hecho un nombre propio en la industria de la moda y la publicidad. A ellas se suman nuevas caras como Sunday Kidman-Urban o Kai Schreiber, que debutaron en las recientes semanas de la moda con reacciones encontradas por parte del público y la crítica.
En el mundo del cine y la televisión, nombres como Maya Hawke, Lily-Rose Depp, Margaret Qualley o Zoë Kravitz han demostrado su talento en importantes producciones, aunque siempre con la sombra de sus apellidos famosos detrás. Lily Collins y Emma Roberts también figuran como ejemplos de actrices que reconocen el papel de su familia en su éxito, pero defienden su propio mérito.
El fenómeno nepo baby también alcanza a figuras como Ava Phillippe, hija de Reese Witherspoon, y Dylan y Paris Brosnan, hijos del actor Pierce Brosnan, quienes se han posicionado como referentes en la moda. Damian Hurley, hijo de Elizabeth Hurley, ha llevado su carrera con el impulso de su madre, pero ha trabajado para consolidarse por su cuenta.
Willow y Jaden Smith, hijos del actor Will Smith, han explorado múltiples facetas en el entretenimiento, desde la música hasta el cine. Ambos han compartido públicamente los desafíos de crecer bajo los reflectores, y cómo la fama influye en su identidad y sus relaciones personales.
Aunque el debate sobre el privilegio y la equidad de oportunidades persiste, lo cierto es que muchos de estos nepo babies han sabido utilizar sus conexiones familiares para lanzar sus carreras, pero también han demostrado compromiso y talento en sus respectivos campos. La discusión sigue abierta entre el mérito propio y el peso del apellido.
*Información de Diario de Yucatán.