La actriz se atrevió a bailar al son de las gaitas con las que fue agasajada
A medida que se acerca la fecha de los Premios Princesa de Asturias, que se llevarán a cabo este viernes 20 de octubre en el Teatro Campoamor, los distinguidos galardonados comienzan a llegar a Oviedo. La última en hacerlo, y gran protagonista de esta edición, es Meryl Streep, quien recibirá el Premio Princesa de Asturias de las Artes. Sin embargo, en esta ocasión también destacaremos a la princesa Leonor, ya que la veremos por primera vez desde que ingresó en la Academia de Zaragoza el pasado agosto sin su uniforme militar.
Aunque la actriz llegó al Principado ayer, lo hizo discretamente. Su recepción oficial, con todos los honores que merece como una de las intérpretes más laureadas de todos los tiempos, tuvo lugar este miércoles por la mañana en el exterior del Hotel de la Reconquista en Oviedo, donde se alojan todos los galardonados.
Optó por la comodidad sin renunciar a la elegancia. Meryl Streep lució un conjunto de blusa y pantalón negro con estampado de hojas en rojo. Combinó su atuendo con accesorios, que incluyen una chaqueta tipo americana corta, un bolso de piel de mano, botines de discreto tacón y gafas de pasta, todo en color negro. La actriz se mostró encantada con el recibimiento que le brindó nuestro país.
Numerosos aficionados, emocionados y sin creer completamente que la 21 veces nominada al Oscar estuviera en Asturias, acudieron al Hotel de la Reconquista con pancartas en su honor para ver de cerca a su ídolo. La aplaudieron y vitorearon mientras ella respondía a tanto cariño con una inmensa sonrisa y saludando con la mano.
Con su naturalidad y cercanía característica, Meryl Streep protagonizó la primera gran anécdota de los Premios Princesa de Asturias al atreverse a bailar al son de las gaitas con las que fue agasajada durante su primera aparición en Oviedo, y parece que le encantó.