Hoy: 14 de noviembre de 2024
Más de la mitad de los españoles (52%) encontrarían dificultades para desplazarse en silla de ruedas por las áreas comunes de los edificios donde viven, mientras que un 55% tendría problemas para moverse dentro de su propia vivienda. Estos datos se desprenden del informe La Voz de la Accesibilidad, elaborado por la Fundación Mutua de Propietarios, que busca visibilizar la realidad diaria de más de 2,4 millones de personas en España con movilidad reducida, de las cuales 270.000 (un 11%) son mayores de 65 años.
La organización sostiene que estas barreras arquitectónicas serían difíciles de solventar para un 40% de los españoles por la complicación que supone poner a todos los vecinos de acuerdo, especialmente si la inversión en obras de adaptación supera los 2.000 euros por vecino.
“La movilidad reducida es uno de los principales problemas de la tercera edad y, por ello, es esencial que las comunidades de propietarios sean conscientes de la necesidad de hacer accesibles los edificios para facilitar la vida de los mayores, contribuyendo a crear una sociedad más inclusiva”, ha destacado la directora de la Fundación Mutua de Propietarios, Cristina Pallàs.
Para este colectivo, las dificultades para transitar libremente no solo aparecen en los espacios comunes de su bloque o vivienda. Acceder a edificios públicos, cruzar pasos de peatones, moverse en transporte público o, incluso, caminar por las aceras, “son acciones que también entrañan una gran dificultad”, según la organización.
Por ello, la accesibilidad de los municipios españoles es calificada con un suspenso (4,7) entre quienes tienen problemas de movilidad y de acuerdo con el informe La Voz de la Accesibilidad, los accesos a edificios públicos son los mejor valorados en materia de accesibilidad (5,65), ya que muchos cuentan con rampas o ascensores, seguidos por los pasos de peatones (5,61), y el transporte público adaptado, valorado con un 5,25. Finalmente, con un suspenso (4,4) quedan las aceras, por su falta de amplitud y su deficiente estado.
Pese a ello, cuatro de cada cinco españoles no se plantean cambiar de lugar de residencia por estos motivos, ya que consideran que el resto de las localidades se encuentran en la misma situación en materia de accesibilidad.
“Aunque la sociedad conoce la existencia de barreras arquitectónicas no es plenamente conscientes de lo difícil que pueden llegar a ser estos obstáculos para desenvolverse en el día a día de las personas con dificultades a la hora de moverse, por lo que las acciones sensibilización y concienciación social resultan fundamentales para alcanzar una plena igualdad de derechos”, ha indicado Cristina Pallàs.
El informe de la Fundación Mutua de Propietarios explora también cómo la sociedad española percibe el día a día de las personas con movilidad reducida. En este sentido, hacer deporte (87%), viajar (84%), subir al transporte público (76%), hacer la compra (74%), o llevar a cabo las tareas cotidianas (73%) son las acciones que entrañan más dificultad para realizar en silla de ruedas. “La accesibilidad no debería ser un lujo, sino una herramienta para que todos puedan participar plenamente de la sociedad”, ha añadido Cristina Pallàs.