Hoy: 23 de noviembre de 2024
Los viajes al espacio podrían desencadenar migrañas y dolores de cabeza de tipo tensional en astronautas, según una investigación reciente publicada en Neurology, la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología. Este estudio, liderado por la Universidad de Leiden en los Países Bajos, arrojó luz sobre los efectos del entorno espacial en la salud de los viajeros.
El autor del estudio, WPJ van Oosterhout del Centro Médico de la Universidad de Leiden, explica que “los cambios en la gravedad causados por los vuelos espaciales afectan la función de muchas partes del cuerpo, incluido el cerebro”. Van Oosterhout señala que la adaptación del sistema vestibular a la ausencia de gravedad puede provocar mareos por movimiento espacial en la primera semana, al ser el dolor de cabeza el síntoma más común.
Durante la investigación, 24 astronautas de diversas agencias espaciales fueron monitoreados durante vuelos a la Estación Espacial Internacional entre noviembre de 2011 y junio de 2018. Antes del vuelo, solo el 38% de los astronautas había experimentado dolores de cabeza, mientras que durante el vuelo, este porcentaje aumentó al 92%. La mayoría de los dolores de cabeza fueron de tipo tensional, aunque un 10% se clasificaron como migrañas.
Van Oosterhout destaca la importancia de investigar las causas subyacentes de los dolores de cabeza en el espacio y desarrollar terapias más efectivas. Advierte que esto es crucial, ya que los dolores de cabeza pueden ser un problema significativo para los astronautas durante los vuelos espaciales.
Es importante tener en cuenta que este estudio no establece una relación de causalidad entre los viajes espaciales y los dolores de cabeza, sino más bien una asociación. Además, las limitaciones del estudio incluyen la autoevaluación de los síntomas por parte de los astronautas, lo que podría afectar la precisión de los datos recopilados.
En resumen, este estudio resalta la necesidad de comprender mejor cómo el entorno espacial afecta la salud de los viajeros y desarrollar estrategias para mitigar los posibles efectos negativos, como las migrañas y los dolores de cabeza tensionales.