La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) han convocado este viernes una huelga nacional del colectivo médico para mostrar su disconformidad con el Estatuto Marco -el texto que regula las condiciones laborales del personal sanitario del Sistema Nacional de Salud- que ha propuesto el Ministerio de Sanidad, ya que consideran que es «inaceptable» para la profesión médica y facultativa.
Las negociaciones para renovar el Estatuto Marco vigente, del 2003 ,empezaron hace aproximadamente dos años. El Ministerio de Sanidad propuso un primer borrador hace unos meses que fue rechazado por los sindicatos.
En mayo, presentó a los sindicatos un segundo borrador con algunas de sus propuestas, no obstante, el Comité de Huelga formado por la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA) cree que el texto sigue sin reconocer la «mayor responsabilidad» del médico y su «liderazgo clínico» en la clasificación de los grupos profesionales y sin proporcionales un marco normativo propio que recoja la singularidad de la profesión.
Los sindicatos reclaman que los facultativos tengan una jornada de 35 horas semanales, así como que la jornada ordinaria y la guardia tengan una duración y franja horaria «claramente delimitadas». Además, exigen que los descansos compensatorios deben computar a todos los efectos como tiempo de trabajo efectivo.
Asimismo, piden que todo el trabajo que se realice en horario nocturno, independientemente de su modalidad, debe tener un coeficiente reductor de jornada, y que los excesos de jornada, incluida la jornada de guardia, no pueden ser retribuidos por debajo de la hora de jornada ordinaria. También consideran necesario que los periodos de descanso se amplíen y estén garantizados.
Los sindicatos aseguran que desde la última reunión celebrada con el Ministerio el pasado 2 de junio no han recibido ninguna respuesta en muchas de sus peticiones. Mientras que sobre la propuesta de Sanidad en la regulación la jornada señalan que «el nuevo Estatuto Marco aspira a consagrar el actual ‘status quo’, basado en el sostenimiento del sistema sanitario público a costa de los derechos laborales de los facultativos».