La franja de edad promedio de los afectados en estos accidentes abarca desde los 40 hasta los 60 años
Los accidentes con patinetes electricos en Baleares experimentaron un aumento del 74% en 2022, con un total de 696 incidentes, en comparación con el año previo. De estos, aproximadamente un tercio presentaron traumatismos craneoencefálicos (TCE), según datos recopilados por Europa Press.
De la totalidad de accidentes con patinetes eléctricos, que podrían ser caídas con consecuencias para el conductor o atropellos a terceros, cerca de un tercio se relacionan con traumatismos craneoencefálicos (TCE). En específico, en 2022 se registraron alrededor de 230 incidentes y en lo que va de este año se han reportado 200.
Txema Álvarez, director médico del Samu 061, señala que, aunque los usuarios habituales de patinetes eléctricos suelen ser jóvenes, resulta llamativo que en los accidentes estén involucradas personas de entre 40 y 60 años de edad. De este grupo, un 60% son hombres y un 40%, mujeres.
Patinetes y sustancias tóxicas: una combinación peligrosa
El director médico subraya que una cuarta parte de los pacientes que llegan al hospital tras sufrir un accidente con un patinete eléctrico han consumido sustancias tóxicas, principalmente alcohol. Este patrón de consumo se relaciona con el uso de estos vehículos para regresar de áreas de ocio.
El Samu ha identificado los lugares y horarios con más casos de este tipo de incidentes. En Palma, Alcúdia, Ibiza y Sant Josep de sa Talaia se reportan la mayoría.
Estos accidentes suelen ocurrir en avenidas, cercanías de plazas y estaciones, y los momentos más frecuentes son entre las 09.00 y las 10.00 horas, así como entre las 19.00 y las 23.00 horas.
Por otra parte, el Samu informa que cada año hay alrededor de diez casos graves de accidentes con patinetes que resultan en alguna discapacidad. Además, en 2021 fallecieron tres personas por este motivo y el año pasado, una.
El casco reduce la gravedad de los traumatismos craneoencefálicos
Las características del patinete eléctrico hacen que la zona de la cabeza sea vulnerable en caso de accidente, especialmente si no se utiliza casco. Actualmente, la normativa en Palma exige llevar un elemento reflectante homologado, pero no obliga al uso de casco.
En este sentido, el director médico menciona que es común sufrir traumatismos craneoencefálicos tras estos accidentes. Sin embargo, las lesiones más habituales ocurren en las extremidades superiores, como las muñecas o los brazos.
Respecto a los TCE, Álvarez apunta que la experiencia del Samu indica que las personas involucradas en accidentes con patinetes no suelen llevar casco. Por tanto, afirma que el uso de esta protección reduciría en gran medida la posibilidad de sufrir un traumatismo craneoencefálico. “Los casos más leves no ocurrirían y en los más graves se reduciría su gravedad”, asegura.
Campaña ‘Patinetes y Bicis a Raya’
La Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (Arca) presentó a principios de año la campaña ‘Patinetes y Bicis a Raya’, con el fin de pedir que estos vehículos no circulen por aceras y otros espacios peatonales en Palma.
La campaña defiende que los patinetes eléctricos y las bicicletas “invaden las aceras con comportamientos incívicos y falta de control municipal”. En este sentido, Jaume Pla, portavoz de Patinetes y Bicis a Raya y miembro de la directiva de Arca, recalca el “comportamiento incívico” de los usuarios de patinetes, quienes “causan lesiones con demasiada frecuencia”.
Por ello, Patinetes y Bicis a Raya demanda vías exclusivas para estos vehículos y para los peatones. “Queremos que nuestras aceras sean solo para peatones, nada más, ni patinetes, ni bicicletas, ni coches, ni motos”, añade Pla.