El día 25 acaba el plazo para inscribir los grupos del parlamento
La flamante presidente Francina Armengol ha sido víctima de su propio entusiasmo por la aplicación inmediata de las lenguas cooficiales del Estado en el Congreso de los Diputados, carente de una regulación específica, mientras JUNTS y ERC siguen pendientes de formar sendos grupos parlamentarios: el plazo acaba el 25 de agosto.
El letrado de las Cortes Generales Manuel Fernández-Fontecha ha advertido que el posible uso generalizado de las lenguas cooficiales en el Congreso necesita cierta regulación porque afecta a los derechos de los diputados que las desconocen, pudiendo llegar a causarles indefensión, porque necesitan comprender lo que se habla para garantizar el necesario debate parlamentario.
El jurista ha explicado que el derecho a manifestarse en una lengua cooficial “no se puede confundir con el hecho de esa manifestación en un procedimiento de derecho público, como es el caso del procedimiento parlamentario”. Así lo ha dicho en una entrevista concedida a Radio Nacional de España (RNE).
“Hay una faceta que se está ignorando: evidentemente hay un derecho a utilizar la lengua cooficial, pero también hay un derecho del diputado restante a la comprensión de lo que se está diciendo”, subraya.
Es decir, que si no se garantiza ese derecho a la comprensión “podría incurrirse en un defecto de procedimiento en cuanto a que no habría un debate propiamente dicho, porque hay una parte que no entendería a la otra”. “Hay que garantizar que la utilización de lenguas no conocidas por otros diputados no les produzca indefensión”, resumió el letrado.
A su juicio, el anuncio de Armengol es “una manifestación de intenciones”, pero ahora habrá que desarrollarlo vía reforma del reglamento o al menos por una resolución de Presidencia avalada por la Junta de Portavoces.
Según ha recordado, el artículo 70 del Reglamento del Congreso, no establece un idioma concreto, y que el artículo 3 de la Constitución, que estipula la cooficialidad del catalán, gallego y el euskera en sus territorios, pero también está “vigente” la práctica de exigir el castellano en sede parlamentaria.
“Hay una norma, y la podemos llamar la norma constitucional, por la cual los presidentes, cuando alguien habla o pretende hablar en un idioma distinto al castellano, se le interrumpe”, subrayando que es una norma certificada por la costumbre.
JUNTS y ERC carecen de requisitos para tener grupo parlamentario propio
Aunque ERC y JUNTS cuentan con siete escaños cada uno, no alcanzaron el 15% del porcentaje de los votos en las cuatro provincias catalanas ni en el conjunto de la comunidad autónoma, teniendo que acudir a alguna fórmula para salvar dicha carencia; siempre bajo el visto bueno de los servicios jurídicos de la Cámara Baja.
Los acuerdos entre los partidos independentistas catalanes y el PSOE para apoyar a Francina Armengol como presidente y al resto de los candidatos progresistas para la Mesa del Congreso incluyen la garantía de que tendrán sus propios grupos parlamentarios, pero en el caso de ambas formaciones el método que empleen deberá estar refrendado por los servicios jurídicos del parlamento, una vez recabado su parecer.
El Reglamento de la Cámara establece que los grupos deben formarse en los cinco días siguientes a la constitución del Congreso, pero la Mesa ha optado por dar un margen de una semana para este trámite. Ahora los distintos partidos y coaliciones deberán registrar el nombre que quieren dar a sus grupos parlamentarios y comunicar quiénes serán sus portavoces; con fecha tope el 25 de agosto.
El órgano de gobierno de la Cámara se reunirá el lunes 28 para autorizar la creación de los mismos, con Junts y ERC en el alero por no cumplir todos los requisitos, un paso imprescindible para la organización del debate de investidura.
Una vez estén constituidos todos los grupos parlamentarios, se podrá convocar la primera reunión de la Junta de Portavoces y diseñar una hipotética sesión de investidura cuya fecha, en cualquier caso, la decidirá la presidenta de la Cámara, tras consultar con el candidato que vaya a solicitar la confianza de la Cámara.
El resto de los partidos no tienen problemas para formar grupo propio; excepto UPN, CC y BNG; con un diputado cada uno, y que formarán el Grupo Mixto; donde las divergencias están aseguradas entre el primero y el segundo con el tercero; navarros y canarios votaron por el PP y el gallego, por PSOE.