De la noche a la mañana los historiales médicos sobre el cribado de cáncer de mama en Andalucía desaparecieron y otros han sido manipulados. Lo dice en una denuncia tramitada ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía la presidenta de la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Sevilla (Amama), Ángela Claverol.
Aunque esta sostiene el supuesto borrado de historiales médicos de las plataformas del Servicio Andaluz de Salud (SAS), en un primer momento la Junta andaluza negó que eso haya sucedido y ahora habla de un fallo informático que ya está solucionado.
Claverol afirma en su denuncia que el supuesto borrado podría ser constitutivo de delitos como obstrucción a la justicia, y ha sido detectado desde hace un par de semanas por mujeres que han acudido a la asociación tras los problemas detectados en el programa de cribado del cáncer de mama.
En una rueda de prensa ofrecida a las puertas de la Audiencia Provincial de Sevilla, la presidenta de Amama ha explicado que la asociación ha tomado esta decisión después de recibir en las dos últimas semanas «quejas de usuarias» en las que advertían de que «presuntamente» se «habrían borrado» mamografías y pruebas de la plataforma Clic Salud y del Diraya, que gestiona y controla los procesos sanitarios en Andalucía.
«Nuestro deber es pedir que se investigue para evitar la indefensión de muchas mujeres que quieren denunciar y no pueden porque no pueden recabar sus propias pruebas«, ha defendido Claverol, que ha remachado que «presuntamente» se habría borrado de mamografías el término lesión «sospechosa» por «probablemente benigna» e incluso el nombre de los radiólogos que hicieron la lectura de las pruebas diagnósticas.
Amama reclama a la Fiscalía que investigue si hay un delito de ocultación de pruebas y de obstrucción a la Justicia. «Ya sea sospechosa o probablemente benigna, sigue diciendo lo mismo, al tratarse de resultados no concluyentes tenían que haberse hecho más pruebas en un tiempo menor”, añade.
Amama solicita a la Fiscalía que la investigación se abra con carácter «urgente» y que cite a las personas que han denunciado esta «presunta destrucción» de pruebas como testigos protegidos.
En las últimas se ha producido la dimisión del jefe del servicio de Radiología en el Hospital Virgen del, Rocío, donde se centran la mayoría de los pacientes a los que no se notificaron los resultados del cribado de cáncer de mama a 2.000 mujeres, y en las próximas horas habrá nuevos ceses de responsables de lo que se entiende como una clara negligencia del Servicio Andaluz de Salud.
Las medidas del Gobierno andaluz en este asunto comenzaron con la destitución de la consejera, un pesto que ocupa en la actualidad Antonio Sanz. El nuevo consejero de Sanidad, Presidencia y Emergencias de la Junta de Andalucía se apresuró a negar que se hayan destruido mamografías o historias clínicas de pacientes del cribado del cáncer de mama.
Sanz ha apuntado que el Gobierno andaluz «respeta la decisión de acudir a la Fiscalía«, con la que, dice, colaborará «al 100%, en un ejercicio, como siempre, de transparencia total para esclarecer cualquier situación». No obstante, ha insistido, «ni con bulos ni con falsedades se ayuda a las mujeres»
La AECC denuncia la «falta de datos»
Por su parte, la directora general de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), Isabel Orbe, ha solicitado más datos sobre los cribados de cáncer. En una rueda de prensa ha defendido que «el diagnóstico precoz salva vidas» y que «la falta de datos impide proteger a la población de manera adecuada», señala el diario ’20 Minutos’. Y añade: “Según ha expuesto, la asociación lleva mucho tiempo hablando de la falta de datos en nuestro país, falta de datos públicos, falta de datos accesibles, comparables y actualizados. Para conseguir la equidad de todos los españoles, todos tenemos derecho a tener la misma Sanidad, independientemente de nuestro código postal.