A partir de enero de 2026, una parte esencial del patrimonio cultural y científico español dará un paso decisivo hacia el acceso libre. La Biblioteca Nacional de España (BNE) ha hecho pública la lista de autores cuyas obras pasarán a dominio público, permitiendo que sus creaciones puedan ser consultadas, compartidas y reutilizadas sin restricciones económicas. Entre los nombres más destacados figuran La Argentinita, Ignacio Zuloaga, Blas Cabrera y Mariano Gómez Ulla, referentes de disciplinas muy distintas pero unidos por un mismo legado.
El listado correspondiente a 2026 incluye 154 autores y autoras españoles fallecidos en 1945 cuyas obras custodia la BNE. Al cumplirse 80 años de su muerte, la legislación vigente permite que aquellas creaciones sin coautoría queden fuera de la protección de los derechos de autor. Esto significa que podrán ser copiadas, adaptadas, interpretadas, difundidas y exhibidas públicamente, siempre que se respete la autoría original.
Todas estas obras estarán disponibles de forma libre y gratuita a través de BNE Digital, una iniciativa que no solo facilita el acceso al conocimiento, sino que también impulsa la educación, la investigación y la creación contemporánea. La lista refleja además la enorme diversidad profesional de la España de principios del siglo XX: científicos, artistas, docentes, periodistas, músicos, religiosas y escritores, muchos de ellos fundamentales para entender nuestra historia reciente, según Europa Press.
Llama la atención que, pese a la amplitud del listado, solo cinco mujeres figuren entre los nombres que pasan a dominio público en 2026, un dato que invita también a la reflexión sobre la visibilidad histórica y el reconocimiento del trabajo femenino.
Entre los nombres más emblemáticos se encuentra La Argentinita, considerada una de las grandes bailarinas de su tiempo. Su labor fue decisiva para la difusión de la música popular española, especialmente gracias a su colaboración con Federico García Lorca, con quien grabó una histórica colección de canciones tradicionales que hoy forman parte de la memoria cultural del país.
En el ámbito de las artes plásticas destaca Ignacio Zuloaga, pintor vinculado a la Generación del 98, cuya obra refleja una España profunda, marcada por la influencia de Goya y El Greco. Junto a él, otros artistas como José Gutiérrez Solana o Manolo Hugué refuerzan la importancia artística de este grupo de autores.
En el terreno científico sobresale Blas Cabrera, físico de gran prestigio internacional, divulgador de las teorías más avanzadas de su tiempo y figura clave en la modernización de la ciencia española. Su obra, al igual que la de otros investigadores incluidos en el listado, podrá ahora llegar a nuevas generaciones sin barreras.
La entrada de estas obras en dominio público no solo amplía el acceso al conocimiento, sino que reactiva un legado que sigue vivo. A partir de 2026, la cultura, la ciencia y la historia española ganan un nuevo espacio de libertad.