La Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) ha explicado que el adelanto de la epidemia de gripe en España está relacionado con la variante K de la gripe A, la cual se caracteriza por una transmisión más rápida. Aunque incrementa notablemente la presión sobre los servicios sanitarios, no implica necesariamente una mayor gravedad de los casos.
En los últimos días, las infecciones respiratorias agudas (IRAs) han experimentado un aumento del 30% en su afluencia a los centros sanitarios. La tasa media de incidencia ha superado los 600 casos por cada 100.000 habitantes, alcanzando en algunas áreas más de 1.600 casos, lo que indica un notable crecimiento de la circulación viral.
Los especialistas en urgencias han advertido de que esta situación provoca un incremento de descompensaciones en pacientes con patologías crónicas, especialmente en aquellos con enfermedades cardiacas o respiratorias. Las personas mayores, inmunodeprimidas y con patologías oncohematológicas figuran entre los colectivos más vulnerables y más afectados por estas complicaciones.
Los hospitales también están notando el impacto del aumento de los virus respiratorios, con un incremento en los ingresos y en la tasa de hospitalización por problemas respiratorios, que ya alcanza los 15 casos por cada 100.000 habitantes. Del total de hospitalizaciones, el 26% se deben a la gripe A, el 2% a la covid y el 4% al virus respiratorio sincitial (VRS).
Ante este panorama, SEMES señala que en algunos centros la actividad podría superar entre un 15% y un 20% la demanda habitual. Por ello, recuerda la importancia de las medidas preventivas para evitar contagios, como el lavado frecuente de manos, cubrirse al toser o estornudar, usar pañuelos desechables, evitar el contacto cercano y no compartir objetos personales, así como limpiar superficies y mantener hábitos de vida saludables.