La Policía Nacional de Manzanares (Ciudad Real) ha liberado a tres víctimas de explotación sexual que residían en condiciones insalubres y que tenían que estar sometidas las 24 horas del día. Además, se ha logrado desarticular un grupo delictivo dedicado a la trata de seres humanos y al tráfico de estupefacientes en la misma localidad. Como resultado de esta operación, se han efectuado dos detenciones por la comisión de delitos relacionados con la prostitución y la salud pública.
La investigación se inició cuando la Policía Nacional centró su atención en un inmueble ubicado en Manzanares, donde se sospechaba que se estaba perpetrando la explotación sexual de varias mujeres extranjeras en situación irregular en el país. Estas mujeres se encontraban en condiciones de retención y se vieron privadas de su libertad.
El varón, que supuestamente era el arrendatario de la vivienda, y la mujer, que desempeñaba el papel de encargada o «madame», gestionaban la publicidad de los servicios y atendían a los clientes.
En el transcurso de los registros realizados, los agentes decomisaron un total de 10,5 gramos de cocaína y 2,6 gramos de marihuana listos para su venta, además de cerca de 2.000 euros en efectivo. También se incautaron de un puñal de 13,5 centímetros de filo y una pistola simulada de la marca Beretta de 9 milímetros parabellum, que presuntamente era utilizada para amenazar a las mujeres explotadas.
Los dos individuos detenidos enfrentan cargos por los delitos de prostitución y contra la salud pública. Durante la investigación policial se determinó que los máximos responsables de la organización, un hombre y una mujer, retenían a ciudadanas extranjeras en la vivienda y obtenían beneficios económicos de la prostitución ajena al exigir a estas mujeres una parte significativa de las ganancias generadas en cada servicio.
Esta operación policial refleja el compromiso de la Policía Nacional en la lucha contra la explotación sexual y la delincuencia relacionada con el tráfico de personas y las drogas, así como la protección de los derechos y la seguridad de las víctimas involucradas. Las autoridades continuarán trabajando incansablemente para prevenir y combatir estas actividades ilegales y para brindar apoyo a quienes se encuentran en situaciones de vulnerabilidad.