Los fármacos convencionales utilizados en el tratamiento del cáncer suelen provocar efectos secundarios indeseados
Un reciente estudio realizado por la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha revelado que la miel, enriquecida con productos apícolas como la jalea real y el propóleo, posee propiedades antitumorales selectivas al inducir la apoptosis en células hepáticas tumorales.
El estudio, publicado en la revista Antioxidants, se centró en analizar las propiedades antitumorales de mieles monoflorales de tomillo y castaño, enriquecidas con diferentes concentraciones de productos apícolas (entre un 2% y un 10% de jalea real y/o propóleo), especialmente en células hepáticas normales y tumorales.
Entre todas las muestras evaluadas, se observó que la miel de castaño enriquecida con un 10% de jalea real y un 10% de propóleo mostró el efecto apoptótico más significativo en células hepáticas tumorales, sin afectar a las células normales.
Selectividad en la inducción de apoptosis
La regulación de la muerte celular programada, conocida como apoptosis, desempeña un papel crucial en el desarrollo del cáncer. Este estudio reveló que tanto la miel sola como aquella enriquecida con productos apícolas no indujeron apoptosis en células normales, por lo que destaca la capacidad selectiva del producto para actuar específicamente en células tumorales.
Los fármacos convencionales utilizados en el tratamiento del cáncer suelen provocar efectos secundarios indeseados. La investigadora Ana Isabel Haza del Departamento de Nutrición y Ciencia de los Alimentos de la UCM sugiere que “el enriquecimiento de mieles monoflorales de tomillo y castaño con productos apícolas podría utilizarse junto con los tratamientos convencionales contra el cáncer como suplemento dietético para reducir los efectos secundarios de la quimioterapia tradicional.”
Métodos de estudio y perspectivas futuras
El estudio implicó el análisis de efectos citotóxicos y propiedades pro-apoptóticas de 17 muestras de mieles, al utilizar técnicas como el ensayo MTT y citometría de flujo. Haza concluye que “se necesitan más estudios para demostrar el potencial de las mieles monoflorales enriquecidas con productos apícolas como ingredientes alimentarios saludables para apoyar la producción local de miel y responder a la creciente demanda de este producto por parte de los consumidores.”