La Guardia Civil de la Región de Murcia ha dado por concluida la segunda fase de la operación ‘Crepúsculo’. La investigación ha permitido esclarecer medio centenar de delitos de robo con fuerza cometidos en viviendas. Los hechos se registraron tanto en municipios de Murcia como en algunas localidades de la provincia de Alicante.
Entre las localidades afectadas destacan Lorca, Puerto Lumbreras, Santomera, Las Torres de Cotillas, Beniel, Águilas y Totana. En Alicante, los robos ocurrieron en Guardamar del Segura, Dolores y Almoradí. Los investigadores detectaron que los autores estudiaban previamente sus objetivos. Solo actuaban cuando comprobaban que no había nadie en las casas. Rompían vallas, forzaban rejas y puertas, y burlaban los sistemas de seguridad, incluidos los circuitos de videovigilancia.
Una vez dentro, registraban rápidamente todas las estancias en busca de dinero, joyas y, en algunos casos, equipos electrónicos. La operación comenzó a finales del pasado año, tras detectarse un aumento de robos en distintas pedanías de Lorca y Puerto Lumbreras. Este aumento generó alarma entre los vecinos, que vivían con miedo a nuevos ataques. Gracias al análisis del modus operandi, los investigadores pudieron anticipar los movimientos del grupo y relacionar varios delitos entre sí.
En febrero, la Guardia Civil localizó un vehículo vinculado a los sospechosos en Lorca. Con la colaboración de la Policía Local, se montó un dispositivo de vigilancia en la zona. Tras una arriesgada persecución a gran velocidad, en la que los delincuentes pusieron en peligro a otros conductores y llegaron a colisionar con vehículos policiales, se detuvo a los tres miembros del grupo.
Una vez arrestados y puestos a disposición judicial, se inició la segunda fase de la operación. El objetivo era esclarecer todos los delitos cometidos por la banda. Gracias al análisis de la información recopilada, los investigadores lograron relacionar y esclarecer alrededor de 50 robos cometidos entre finales de 2023 y febrero de 2025.
La operación ‘Crepúsculo’ pone de relieve la eficacia de la coordinación entre la Guardia Civil y la Policía Local. Además, muestra la importancia de la investigación detallada y la anticipación de los movimientos de los delincuentes. Los vecinos de los municipios afectados pueden ahora recuperar cierta tranquilidad tras meses de incertidumbre y miedo a los robos.