Hansi Flick no se esconde. El técnico del FC Barcelona afronta el estreno en la Champions contra el Newcastle con un mensaje claro: su equipo está preparado. El entrenador alemán subrayó que la clave será mantener una alta intensidad desde el inicio. “Es Champions, no hay partidos fáciles. Enfrente tendremos a un rival fuerte, con físico y mucha energía. Pero vamos con confianza”, explicó en la previa.
El recuerdo del último triunfo liguero frente al Valencia dejó buenas sensaciones en el cuerpo técnico. “Me gustó mucho lo que vimos, todos querían el balón, todos participaron. Esa es la idea que buscamos”, señaló. Flick valora especialmente la implicación del grupo en defensa y ataque, y cree que ese esfuerzo colectivo será decisivo en St James’ Park, uno de los estadios más exigentes de Inglaterra.
La ausencia de Lamine Yamal, y las bajas de Balde y Gavi, no cambian el plan. El alemán insistió en que cuenta con un equipo completo y equilibrado en todas las posiciones. No quiso dar pistas sobre su once, pero destacó la importancia de Raphinha por su presión y capacidad de gol. “Es un jugador clave para nosotros”, subrayó.
El ambiente inglés no preocupa al vestuario. Flick recordó que varios futbolistas ya saben lo que es competir bajo máxima presión. “Tenemos jóvenes con ambición y jugadores experimentados que han ganado títulos. La mezcla es buena”, comentó. El reto, insiste, será imponer el estilo azulgrana desde el primer minuto, según ha publicado Europa Press.
La ambición europea está muy presente en el discurso del entrenador. Flick admitió que siente en el vestuario un deseo común: levantar la Champions. “Noto ese sentimiento en todos. Queremos ganarla, aunque sabemos que el camino es largo y complicado”, confesó.
El alemán evitó hablar de favoritismos, consciente de que el torneo reúne a los mejores clubes del continente. Pero no esconde que percibe un paso adelante en la mentalidad del grupo. “El año pasado estuvimos cerca. Este año queremos mejorar día a día. Ese es el objetivo”, apuntó.
Flick también resaltó el crecimiento de jugadores como Marcus Rashford, a quien sigue desde sus inicios en el Manchester United. El técnico se mostró ilusionado con lo que puede aportar en esta edición europea, especialmente en un escenario como Inglaterra.
El mensaje de Flick es directo. Intensidad, confianza y hambre de títulos. El Barça empieza su andadura en la Champions con un entrenador convencido de que el equipo está listo para competir con los mejores. Y con la certeza de que en el vestuario se respira un mismo deseo: volver a ser campeón de Europa.