El que fuera chofer de María Teresa Campos confía en que Carmen Borrego perdone a su hijo
Gustavo Guillermo, tras aparecer este viernes en el programa TardeAR para hablar sobre la exclusiva de José María Almoguera y Paola Olmedo atacando a Carmen Borrego, se dejaba ver saliendo de las instalaciones de Telecinco recalcando su postura.
Guillermo defiende al hijo de Borrego y aseguraba que “si quiere sacar dinero, ¿qué hay de malo? Uno decide lo que hace con su vida, como hacen tantísimos otros y no se dice nada”.
El que fuera chofer de María Teresa Campos comentaba que “el chaval está en su pleno derecho de ganar, de vender una exclusiva si le falta el dinero, si no, que haga lo que quiera” y además, dejaba entrever que podía haberse equivocado al hablar en esos términos de su madre.
“Yo a José le quiero, es un buen chaval” explicaba y dejaba claro que lo único que necesitan madre e hijo es tiempo: “¿Qué ha podido meter la pata? Todos la metemos. El tiempo pone a cada uno en su sitio, y el tiempo cura todo. Cosas que ahora no te importan, el tiempo hace que se olvide todo, de verdad”.
Sin pelos en la lengua, Gustavo desvelaba que “es complicado” hacer frente a las críticas de un hijo y, en este caso explicaba que “no está bien” lo que ha hecho porque “yo nunca atacaría a mi madre, jamás”.
Confía en que la hija de María Teresa Campos perdone a su hijo a pesar de todo ya que “es su madre” y por eso tiene claro que “le va a perdonar, seguro, Carmen sabe pedir perdón y él le pedirá perdón y al final lo arreglarán”.
En cuanto a Terelu Campos, Gustavo reconocía sentir pena por no tener relación con ella y dice que está en sus manos reconciliarse: “De un tiempo a esta parte me siento dolido. Sí, pero no le pasa nada. En todas las peleas, todas las familias cuecen habas, o sea, que al final haremos las paces y ya está”.
Aunque no ha pasado nada entre ellos, el ‘hermano’ de las Campos desea que en un futuro pueda retomar esa relación con Terelu: “Es que no es una cuestión de que yo quiera hablar con ella. Es cuestión de… de que también ella quiera hablar conmigo, y no veo ninguna intención. Me da mucha pena”.