El comisario de Comercio, Maros Sefcovic, ha concluido sin acuerdo la reunión de varias horas en Washington con sus contrapartes de la Administración Trump para tratar de pactar una solución que ponga fin a la guerra de aranceles lanzada por el presidente de Estados Unidos.
Al término de su encuentro con el secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, y con el responsable comercial, Jamieson L. Greer, Sefcovic ha escrito en redes sociales que la Unión Europea sigue dispuesta a llegar a «un acuerdo justo».
El comisario, que habla en nombre de los 27 en materia comercial, también ha avisado en su breve comunicado que llegar a una solución exigirá un «importante esfuerzo conjunto por ambas partes», al tiempo que ha reiterado la oferta de Bruselas para un acuerdo de «reciprocidad» con «cero aranceles» para los bienes industriales.
En todo caso, el comisario eslovaco ha insistido en «aprovechar la ventana de oportunidad» que se han dado Bruselas y Washington con la «pausa de 90 días» en las represalias europeas a la primera tanda de aranceles que Trump sí mantiene sobre el acero y el aluminio europeos.
Horas antes del encuentro, del que no ha trascendido ninguna imagen, el portavoz de Sefcovic, Olof Gill, insistió en que el Ejecutivo comunitario, que tiene la competencia exclusiva de la política comercial de la UE, aboga por una «doble vía» que combina los esfuerzos de diálogo con la preparación de las contramedidas.
En un gesto por dar «una oportunidad a la negociación», la Comisión Europea formalizó precisamente este lunes la suspensión automática de la primera ronda de represalias que debían entrar en vigor también este 14 de abril, después de que los 27 respaldaran con el único voto en contra de Hungría las contramedidas diseñadas por los servicios comunitarios.
De este modo, los aranceles del 25% sobre compras por valor de casi 21.000 millones de euros en compras a Estados Unidos quedan congelados hasta el 14 de julio, con el aviso de Bruselas de que serán reactivados de inmediato si se frustran las negociaciones.
En este espacio para la negociación, Trump redujo del 20 al 10% los aranceles indiscriminados que impuso a todas las importaciones europeas, la tasa que llama «recíproca» pese a no corresponderse con medidas equivalentes del lado de la UE, pero mantiene sin cambios tanto el 25% con el que grava las compras de acero y aluminio europeos como el otro 25% que impuso al automóvil y componentes procedentes de la UE.
La propia presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, advirtió al anunciar la semana pasada la suspensión que la represalia puede «reactivarse» en cualquier momento si se frustra la negociación. Además, añadió que la preparación de la segunda roda de contramedidas sigue en marcha, aunque fuentes comunitarias precisaron que no se anunciará el avance de los trabajos mientras funcione la negociación.
En la gama de opciones que los europeos sopesan para una eventual segunda ronda, «todas las posibilidades siguen sobre la mesa», según ha reiterado este mismo lunes el portavoz de Sefcovic, en referencia a la opción de tasar las grandes tecnológicas de Estados Unidos como parte de las medidas anticoerción que pueden usar los 27 frente a presiones económicas de terceros.
Por su parte, el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, viajará a Washington en las próximas horas para reunirse con el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, y con otras autoridades, instituciones multilaterales y representantes empresariales del país, en un contexto marcado por el conflicto comercial surgido tras la llegada de la nueva Administración Trump.
Fuentes del Ministerio de Economía han confirmado que el ministro Cuerpo mantendrá este mismo martes un encuentro con el secretario del Tesoro, Scott Bessent, en el marco de la relación habitual con sus homólogos para fortalecer los lazos con uno «de los mayores socios comerciales» para España.
Además se reunirá en Washington D.C. con el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga y representantes de empresas estadounidenses con intereses en España.
Según el Gobierno, este viaje de la delegación española se produce «en coordinación y contacto continuo» con la Comisión Europea y tendrá lugar un día después de que el Comisario europeo de Comercio visite a sus homólogos estadounidenses, en el marco de una negociación arancelaria entre la Unión Europea y Estados Unidos, que busca proteger la relación comercial transatlántica, la más relevante del mundo.
Según ha trasladado el ministro a un grupo de periodistas corresponsales con quien esta mañana ha mantenido un encuentro, durante la reunión que mantendrá mañana con el secretario del Tesoro de EE.UU. tratarán «todos los temas bilaterales de relevancia», con el objetivo de reforzar las relaciones entre España y Estados Unidos, «que vienen creciendo en los últimos años y están viviendo uno de sus mejores momentos».
Además, Cuerpo ha detallado que los encuentros con «numerosos empresarios estadounidenses», tienen como objetivo aprovechar al «máximo» la visita para reforzar el rol de España y el interés por parte de estos empresarios americanos «por invertir y por desarrollar sus actividades en España».