Europa conquista la Ryder Cup en Nueva York tras un final de infarto

Luke Donald reconocería después que había vivido “las doce horas más estresantes” de su vida

Europa conquistó la Ryder Cup 2025 al imponerse por 13-15 a Estados Unidos. La victoria llegó este domingo en el recorrido de Bethpage Black, en Nueva York, tras una última jornada dramática en la que el anfitrión rozó una remontada histórica en los once partidos individuales.

El equipo de Luke Donald, que ya había capitaneado el triunfo en Roma 2023, partía con clara ventaja. Europa había ganado las cuatro sesiones previas y afrontaba el domingo con siete puntos de renta (4.5-11.5). Sin embargo, el talento estadounidense, respaldado por el ranking mundial, puso la Ryder en jaque. Los europeos solo lograron una victoria en once duelos y tuvieron que esperar al desenlace de Shane Lowry y Tyrrell Hatton para sellar el título.

Pero la ausencia del noruego Viktor Hovland, lesionado en el cuello, redujo a once los enfrentamientos. Ese partido se resolvió automáticamente con medio punto para cada equipo, dejando a Europa a dos de retener la copa. El escenario parecía controlado, pero Estados Unidos encendió Bethpage Black y tiñó la clasificación de rojo, obligando a los visitantes a sufrir.

Aunque el sueco Ludvig Aberg firmó la única victoria individual europea del día. Lowry aseguró la retención de la Ryder con un empate clave y Hatton certificó el triunfo en el penúltimo partido. Así como Robert MacIntyre añadió otro medio punto que dejó el marcador definitivo en 13-15. Fue la quinta victoria europea en suelo estadounidense, tras las de 1987, 1995, 2004 y 2012.

Estados Unidos roza la remontada

Estados Unidos necesitaba un milagro y casi lo consigue. Cameron Young, el mejor local del torneo, abrió la jornada derrotando a Justin Rose. El inglés había logrado una remontada mágica en el hoyo 13, pero no pudo concretar en el 18. Ocho partidos llegaron hasta ese último ‘green’, casi inédito en viernes y sábado, según recoge Europa Press.

Justin Thomas mantuvo su pleno en individuales (4-0) y venció a Tommy Fleetwood con un putt decisivo. Las celebraciones del equipo de Keegan Bradley prendieron al público y dieron alas al resto. Y Bryson DeChambeau protagonizó una remontada épica, ya que iba cinco hoyos abajo en el siete y acabó empatando con Matthew Fitzpatrick.

Asimismo, la Ryder, que parecía resuelta por la mañana, volvió a abrirse. Estados Unidos evocaba Brookline 1999 y el milagro de Medinah 2012, esta vez en versión local. Rory McIlroy cayó ante Scottie Scheffler. El número uno del mundo pidió la hora, pero se impuso. Jon Rahm también cedió, derrotado 4 y 3 por Xander Schauffele tras hundirse en los segundos nueve hoyos.

En ese contexto llegó aire para Europa. Aberg derrotó a Patrick Cantlay por 2 y 1, confirmando el único triunfo continental del día. Donald reconocería después que había vivido “las doce horas más estresantes” de su vida.

Con cinco partidos en juego, Estados Unidos necesitaba ganarlos todos. JJ Sapun venció a Sepp Straka, pero Lowry, entre abucheos y provocaciones de la grada neoyorquina, rescató medio punto frente a Russell Henley. Ese empate aseguró la defensa del título y desató su desahogo emocional en el hoyo 18.

Sin embargo, el debutante Rasmus Hojgaard perdió por un hoyo ante Ben Griffin, aunque ya era intrascendente. Finalmente, Tyrrell Hatton, héroe inesperado, derrotó a Collin Morikawa para cerrar el 14.5 necesario y confirmar la victoria.

Europa sufrió hasta el final. Partía con siete puntos de ventaja y acabó dependiendo de Hatton. Pero Donald, como Tony Jacklin hace casi 40 años, firmó un histórico triunfo a domicilio.