El gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ha señalado que el actual debate sobre el gasto en defensa «no está bien centrado» y debería enfocarse en cuál es el ritmo adecuado para aumentar dicha inversión, de forma que sea eficaz y contribuya positivamente a la economía.
Durante su intervención, Escrivá ha puesto como ejemplo a Alemania, que contempla elevar su gasto militar en tres décimas del PIB anuales de forma progresiva, partiendo «desde el 2 y pico en el que está ahora». En el caso del Reino Unido, ha indicado que la propuesta es de un incremento de dos décimas del PIB.
«Yo, sinceramente, creo que más de dos décimas, tres décimas al año, no es simplemente posible. Si fueras más allá de eso, probablemente el gasto que despliegues o la inversión que despliegues no va a ser eficaz, no tienes capacidad técnica de hacerlo. Yo me centraría mucho más en el ritmo al cual uno puede ir avanzando, y la referencia va a ser móvil. Ahora decimos que es ésta, pero dentro de unos años las amenazas pueden ser menores o son mayores, o hay avances tecnológicos que exigen un gasto menor o mayor», ha explicado en una entrevista con Onda Cero recogida por Europa Press.
Desde su punto de vista, el debate debería orientarse más hacia cómo escalar el gasto a lo largo del tiempo, en lugar de centrarse únicamente en alcanzar una cifra objetivo. En este sentido, Escrivá cree que centrarse en el medio y largo plazo «puede ser una narrativa interesante», pero insiste en que lo verdaderamente relevante «desde el punto de vista de la eficacia económica, de lo que es factible y lo que es mejor hacer, es el ritmo al cual uno lo va desplegando en el tiempo». «Y el debate, desgraciadamente, no está suficientemente focalizado en esto», ha asegurado.
Asimismo, ha subrayado la importancia de la cooperación a nivel europeo en materia de defensa. Escrivá considera «mucho más deseable» que las iniciativas de gasto e inversión se coordinen entre los países de la Unión Europea, ya que eso permitiría una mayor eficiencia y un mayor impacto económico positivo.
Según el gobernador, una estrategia común en Europa no solo mejoraría la eficacia de la inversión, sino que también reforzaría el valor añadido del gasto militar en términos de innovación, industria y cohesión estratégica entre los Estados miembros.