El triunfador de Montecarlo consigue su segundo título de Masters 1000 en una final sólida frente a Auger-Aliassime
Andrey Rublev remontó (4-6, 7-5, 7-5) al canadiense Felix Auger-Aliassime en la final del Mutua Madrid Open, segundo Masters 1000 en su palmarés para culminar una semana gloriosa que le devuelve un papel protagonista en el circuito.
El número ocho del mundo llegó a la capital española sin haber ganado un partido desde principios de marzo en Indian Wells y salió de la Manolo Santana como un favorito a Roma y Roland Garros. La tierra de la Caja Mágica se alió con el ruso, verdugo del español Carlos Alcaraz en cuartos de final.
Rublev se ganó a pulso ser el nuevo campeón en Madrid, porque derrotó al defensor del título y llegó hasta el encuentro decisivo con temple y calidad para dar la vuelta a la final. El mal inicio lastró al ruso con un 1-4 que fue imposible de remontar ante un Auger-Aliassime que buscaba el mayor título de su carrera.
Pese a verse de manera inspirada el pasado domingo del Mutua Madrid Open, el canadiense buscó su oportunidad y empezó a ser un muro contra el ruso. Con todo, Rublev aprovechó un delicado duodécimo juego del segundo set para meterse de lleno en la pelea.
En el desempate del tercer acto, Auger-Aliassime salvó cinco bolas de break, pero Rublev no se desesperó, al acecho hasta que el canadiense entregó la final con una doble falta. Cruel desenlace para el americano, que encumbró a un Rublev que, tras Montecarlo el año pasado, ganó su segundo Masters 1000 y el decimosexto título de su palmarés, segundo en 2024 tras el de Hong Kong.