El masivo apagón eléctrico que afectó a la Península Ibérica desde las 12.33 del lunes ha tenido consecuencias trágicas: al menos cinco personas han perdido la vida en diferentes puntos del país por causas derivadas directamente del corte de suministro.
Las víctimas fallecieron en circunstancias dramáticas, vinculadas a la pérdida de servicios esenciales y al uso de medios alternativos para sobrellevar la falta de electricidad, según detalla El País.
En el pequeño municipio de Taboadela, en Ourense, una familia entera compuesta por un matrimonio y su hijo fue hallada sin vida en su domicilio. Las primeras investigaciones apuntan a una posible intoxicación por monóxido de carbono, originado por un generador doméstico.
La Guardia Civil y forenses del Instituto de Medicina Legal de Galicia intentan esclarecer si el mal funcionamiento del aparato fue el responsable del trágico suceso. Mientras tanto, en Cataluña se reportaron múltiples intervenciones de los bomberos por incidentes similares relacionados con generadores.
En Alzira, Valencia, una mujer de 46 años con una patología pulmonar murió al quedar sin el oxígeno que le proporcionaba un dispositivo eléctrico, tras la interrupción del servicio. Aunque la Policía Nacional y los servicios de emergencia intentaron reanimarla durante casi media hora, sus esfuerzos fueron en vano.
Finalmente, en el distrito madrileño de Carabanchel, un incendio declarado durante el apagón acabó con la vida de una mujer. La principal hipótesis policial es que una vela encendida durante la oscuridad causó el fuego, que se propagó rápidamente por la vivienda. La víctima murió por inhalación de humo, y al menos trece personas más resultaron afectadas, cinco de ellas trasladadas al hospital.
La falta de electricidad no solo paralizó servicios esenciales sino que, como demuestra esta jornada fatídica, también cobró vidas, elevando la gravedad de lo que comenzó como un corte de luz generalizado.
Las autoridades continúan investigando las causas exactas del apagón mientras los ciudadanos exigen medidas preventivas para evitar nuevas tragedias.