Niko Kovac, entrenador del Borussia Dortmund, encara el partido de vuelta ante el FC Barcelona con una consigna clara: hay que ganar, sin importar por cuánto. El contundente 4-0 de la ida en el Camp Nou dejó al conjunto alemán al borde del abismo, pero el técnico croata no quiere que su equipo se despida de la Champions sin pelear. “Queremos mostrar una cara distinta a la de Barcelona”, sentenció en rueda de prensa, según una información de La Prensa.
Aunque no promete milagros ni hace paralelismos forzados con remontadas épicas del pasado, Kovac reconoce que tienen una oportunidad para al menos limpiar la imagen. “Recordamos lo del Liverpool, claro. Pero esto es otra historia. El Barça no ha perdido este año, eso habla por sí solo”, explicó.
El técnico también se refirió al riesgo de lanzarse al ataque sin red. “Hay que ser inteligentes. Ellos tienen dinamita arriba, ya lo vimos”, advirtió. En lo táctico, la gran incógnita es la presencia del capitán Emre Can, quien arrastra molestias y hoy solo hizo trabajo individual. “Está tocado, pero siempre ha ido al límite. Mañana decidiremos”, añadió Kovac, dejando en el aire una de las piezas clave del vestuario.