Un tiroteo ocurrido el sábado en la ciudad de Stockton, en el norte de California, dejó al menos cuatro muertos y diez heridos, entre ellos varios menores. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las 18:00 horas, durante lo que debía ser una celebración familiar. Las autoridades confirmaron que se estaba llevando a cabo un cumpleaños infantil dentro de un establecimiento de comida rápida cuando comenzaron los disparos.
El teniente de alcalde de Stockton, Jason Lee, lamentó la tragedia y subrayó que el ataque se produjo en un contexto familiar y festivo. Por su parte, el fiscal del condado de San Joaquín, Jon Freitas, pidió a la ciudadanía que proporcione cualquier información que pueda ayudar a identificar al responsable, instando a colaborar “inmediatamente” con las autoridades.
Los testigos describieron al presunto agresor como un individuo que actuó solo, de aproximadamente 1,68 metros de altura y vestido con pantalones negros. Residentes del área relataron haber escuchado varias ráfagas de disparos. La alcaldesa de Stockton, Christina Fugazi, expresó su profunda tristeza: “Este es el fin de semana de Acción de Gracias… Y, lamentablemente, esta noche el cielo es un poco más grande”, dijo en referencia a las víctimas.
La alcaldesa también reiteró el llamado a la colaboración ciudadana para detener al autor del ataque. En sus palabras, esta tragedia muestra que todavía “tenemos trabajo que hacer” y aseguró que Stockton “es mejor que esto”, condenando enérgicamente la recurrencia de la violencia armada en la ciudad.
La oficina del gobernador de California, Gavin Newsom, anunció que está coordinando los esfuerzos de investigación junto con diversas agencias federales y locales. Las autoridades continúan recopilando datos para esclarecer el móvil del ataque y dar con el responsable cuanto antes.