Carta de un asesinado por ETA

1 de octubre de 2022
1 minuto de lectura
charco de sangre

¿Qué pasó aquel día para que fuese mi último día?

Tenía que ir a mi trabajo como siempre, dejé a mis hijos en el colegio y continué hasta un pueblo cercano hasta la nave donde desde hacía muchos años trabajaba.

La mañana pasó y salí con tres compañeros para comer en el pequeño bar donde todos solíamos acudir. Mi vida era eso: trabajo, familia y las charlas que de una manera distendida teníamos los fines de semana.

Creo que fui sentenciado cuando di mi punto de vista y ninguno me siguió. Pero no fueron mis compañeros, estábamos vigilados por otros que escuchaban y calificaban.

Pasó el día y cuando cogí el coche me sentí observado, pero quería llegar a casa con mi familia lo antes posible y no pensé. Me paré para poner gasolina y en ese mismo instante noté un calor enorme en un punto de mi cabeza.

Y un frío que me helaba, además de un líquido oscuro que me inundaba y tapaba mis ojos y bajaba hasta mi boca. Era caliente y dulce.

Sólo unos instantes y me di cuenta de que todo estaba terminado: habían terminado con mi vida.

Vi a mi familia, mi pobre mujer con mis hijos, mi madre y mi padre… ¿y ahora qué? Yo ya no existía, ya no estaba con ellos, pero estaba tranquilo, mi verdugo sería capturado y sufriría las consecuencias de su terrible acto, pero no quería venganza, no sentía odio, sólo sentía mucha paz.

Después de años y desde donde me encuentro, rodeado de felicidad y amor, esperando a los míos, tengo que escribir esta carta a mis verdugos para pedirles PERDÓN.

Os pido PERDÓN, etarras, por haber existido, por tener ideas propias, por no sucumbir a los cantos de sirenas dirigidos para adoctrinar conciencias.

Pido PERDÓN por ser feliz amar a mi tierra sentirme español y orgulloso de serlo.

Pido PERDÓN por sentir que la mejor manera de vivir es respetar al otro.

Pido PERDÓN por no ser como mis verdugos, que con matar se erigían como justicieros de una falsa doctrina.

Pido PERDÓN por no brindar por la muerte de nadie.

Pido PERDÓN por no coincidir con quien aplaude.

Pido PERDÓN por quien firmó mi sentencia de muerte.

Quiero que os llegue mi PERDÓN.

1 Comment Responder

  1. Es estremecedor….y asombroso que pueda generar un sentimiento de perdón ante el más vil asesinato. ¿Cómo hemos llegado a esto?
    Vivimos en un mundo demasiado injusto.

Responder

Your email address will not be published.

No olvides...

Isabel Preysler lanza sus memorias ‘Mi verdadera historia’ el mismo día que se homenajea a Vargas Llosa

Se celebrará en Cáceres la VI Bienal Mario Vargas Llosa, un homenaje literario al reciente fallecido, y que fue pareja…

Lady Gaga se une a ‘El Diablo Viste a la Moda 2’

La trama girará en torno al reencuentro entre Miranda y Andy en un mundo dominado por las redes sociales y…

Hollywood despide a Diane Keaton, leyenda del cine

Hollywood llora su partida, pero celebra una vida dedicada por completo al arte y a la pasión por contar historias…

Jennifer López y el beso incómodo que revela las tensiones entre arte y poder

El beso, ese pequeño acto íntimo, se convierte otra vez en un símbolo de resistencia…