Carlos Alcaraz debutó en el Abierto de Estados Unidos con una victoria contundente frente al estadounidense Reilly Opelka (6-4, 7-5, 6-4). El murciano, número uno del tenis español, se mostró sólido desde el inicio y resolvió el partido en poco más de dos horas, firmando un estreno convincente en el último Grand Slam de la temporada.
El español dominó el encuentro con un servicio impecable, en el que apenas concedió tres pelotas de rotura, todas salvadas con solvencia. Además, cometió solo 17 errores no forzados, lo que le permitió controlar el juego ante un rival siempre peligroso como Opelka. Su buen momento físico, tras el título en Cincinnati, volvió a quedar demostrado sobre la pista dura de Nueva York.
Alcaraz no ha perdido nunca en una primera ronda de un Grand Slam, y con este triunfo suma ya 19 debuts exitosos en torneos mayores. Desde el inicio presionó el servicio del estadounidense y aprovechó su primera oportunidad para romperle el saque en el primer set, que se llevó por 6-4 gracias a su solidez con el servicio.
En la segunda manga, Opelka equilibró el encuentro, pero el español volvió a imponerse en los momentos clave. Con el marcador igualado a cinco juegos, Alcaraz rompió en blanco el saque de su rival y, posteriormente, cerró el parcial con autoridad. El guion se repitió en el tercer set, donde un único ‘break’ en el tramo decisivo marcó la diferencia.
Con este triunfo, Alcaraz avanza a la segunda ronda, donde se enfrentará al italiano Mattia Bellucci, número 65 del mundo, que llega tras vencer al chino Juncheng Shang por abandono. Será el segundo duelo entre ambos, después de que el español se impusiera en 2020. El murciano buscará prolongar su buena racha y confirmar su candidatura al título en Nueva York.