La empresaria ha muerto a los 46 años en Marbella a causa de un infarto y solo tres semanas después de perder a su padre
Carla Goyanes atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida tras la pérdida de su padre, Carlos Goyanes, el pasado 7 de agosto, y apenas 19 días después, la inesperada muerte de su hermana, Caritina Goyanes. Desolada, pero con el apoyo incondicional de su marido, Jorge Benguría, Carla llegó al tanatorio de Marbella para despedirse definitivamente de una de las personas más importantes de su vida.
En su llegada, donde la veíamos completamente derrotada y de riguroso negro, Carla se fundía en un tierno y cariñoso abrazo con sus sobrinos, Cari y Pedro, que aún están asimilando la triste pérdida de su madre a los 46 años debido a un infarto. Demostrando la maravillosa relación que mantiene con sus sobrinos, Carla y Jorge intentaban consolar a los pequeños que están viviendo uno de los momentos más complicados de sus vidas.
Junto a sus hijos, también el marido de Caritina y viudo, Antonio Matos, se fundía en un abrazo con sus cuñados con los que mantiene una relación intachable. La familia y todos aquellos que la conocían han recibido un gran golpe con esta pérdida, especialmente su madre, Cari Lapique, quien aún está inmersa en el duelo por la muerte de su marido Carlos Goyanes.