La interprete está muy emocionada con una obra de teatro en la que trabaja con el actor y escritor Wajdi Mouawad
La actriz Juliette Binoche ha asegurado que los artistas, los actores tienen “la suerte de poder emocionar y cambiar vidas del otro”. “Y eso es lo que me interesa”, ha aseverado en un encuentro con los periodistas en Málaga, donde en la noche de este viernes recibe el Premio Honorífico del Festival de Cine Francés.
En este encuentro, celebrado en la Alianza Francesa de Málaga con motivo del certamen que cumple 30 años, Binoche ha dicho que no le interesa mirar atrás: “Lo que quiero es vivir el presente, estar en la punta de la emoción”. “Pienso que mi papel como actriz es emocional y ser una suerte de espejo, de terapeuta para el otro”, ha asegurado.
Binoche ha explicado que no le interesa la acumulación de filmes a nivel cuantitativo en su trayectoria, para ella siempre “han primado los retos y los proyectos que llenan el alma”. “Se trata de elegir bien la obra que me va a conmover, que va a cambiar mi vida”, ha sostenido. También ha dicho que “el papel que más me toca es el que va a tocar al espectador”, que también tiene su responsabilidad.
Ha adelantado que uno de los proyectos futuros que más le ilusionan es una obra de teatro en la que trabaja con el actor y escritor Wajdi Mouawad, y que estrenará pronto en el Teatro del Epidauro en Grecia. Además, ha indicado que “si los guiones siguen siendo tan malos” como en el panorama actual, quizás se anime a dirigir, y además ha reconocido que existe “un movimiento” de ascenso de la mujer en el cine.
Sobre el 30 Festival de Cine Francés de Málaga, Juliette Binoche ha indicado que “el hecho de poder tejer nuevos vínculos” ha sido un plus para aceptar la invitación, así como “visitar España, que es siempre maravilloso”. Además, también ha dicho estar “muy emocionada” por que sea la actriz Ángela Molina la que le entregue este galardón; “es como si me reencontrara con una hermana”.