Angy Fernández ha dejado a sus seguidores sin palabras. La artista, de 35 años, ha anunciado entre lágrimas que debe abandonar los escenarios de forma urgente. Una noticia que ha compartido con mucha emoción y algo de resignación. “Asimilando que me voy”, confesaba en un vídeo que publicó en sus redes sociales, donde explicaba los motivos de esta repentina decisión.
La cantante y actriz formaba parte del elenco del musical Godspell, una producción dirigida por Antonio Banderas. Sin embargo, una inoportuna lesión en la rodilla ha hecho que tenga que pasar por quirófano antes de lo previsto. “Iba a estar aquí cuatro meses y me tengo que ir porque me operan ya el lunes”, contaba visiblemente afectada.
Angy no ha podido evitar emocionarse al recordar su última función, en la que recibió una cálida despedida por parte de sus compañeros. “Antonio me ha subido al escenario y me ha dado este regalo. Y mis compañeros y todo. Ha sido precioso”, relataba conmovida. Un gesto que, según la artista, jamás olvidará.
Aunque este parón llega en uno de los mejores momentos de su carrera teatral, la intérprete se muestra agradecida por todo lo vivido. “Esta lesión ha hecho que no pueda estar encima del escenario”, explicaba, aceptando con madurez lo que la vida le pone por delante.
Fiel a su carácter reflexivo y optimista, Angy ha querido dejar un mensaje lleno de esperanza. “Todo pasa por algo. Veremos por qué ha pasado esto. Os quiero”, escribió al final de su comunicado. Sus palabras reflejan la serenidad con la que afronta este nuevo desafío personal.
La artista ha recibido una oleada de cariño por parte de sus seguidores y compañeros de profesión, que han llenado sus redes con mensajes de apoyo. Muchos le desean una pronta recuperación y esperan volver a verla sobre el escenario muy pronto.
Este adiós no parece definitivo. Todo apunta a que se trata de un parón temporal para recuperarse completamente y volver con más fuerza. Mientras tanto, Angy Fernández se toma un respiro obligado, pero necesario.
Con su habitual sinceridad, ha querido compartir este momento con su público, demostrando una vez más su cercanía y humanidad. Porque, como ella misma dice, “todo pasa por algo”. Y aunque cueste asimilarlo, sus fans confían en que este solo sea un hasta luego.