Hoy: 28 de noviembre de 2024
En medio de la controversia generada en las últimas semanas, Ana Obregón ha decidido dar un giro a la situación al reaparecer públicamente. Se le señaló por no cumplir su promesa de donar las ganancias de sus exclusivas a la Fundación Aless Lequio y por su labor en la organización contra el cáncer en nombre de su difunto hijo. Además, la bióloga protagonizó un enfrentamiento con Alessandro Lequio.
Después de que se revelara que no cumplió con la donación prometida, Alessandro Lequio no titubeó en criticar a la madre de su hijo, acusándola de “arrastrar” y “ensuciar” el legado de Aless. Ante esto, Ana Obregón defendió su honestidad y destacó que fue ella quien cuidó de su hijo desde su nacimiento hasta el día de su entierro.
Alessandro Lequio, en una intervención en Vamos a ver, reconoció la labor de Ana en la crianza de su hijo y, tras calificar como “oscuro y malicioso” recordar el pasado, decidió poner fin a la disputa. Expresó cariño y máximo respeto por Obregón, comprometiéndose a no abordar públicamente el tema.
En su esperada reaparición como pregonera de la Virgen de la Paz de Alcobendas, Ana Obregón enterró el hacha de guerra con Alessandro Lequio. Emocionada, afirmó: “Lo quiero muchísimo. Alessandro es el padre de mi hijo y siempre estaremos unidos por nuestro hijo y por su memoria.” Dejó claro que, por respeto a su hijo, desean mantenerse unidos, sin resentimientos por las declaraciones anteriores.
En cuanto a la negativa de Alessandro Lequio de conocer a su nieta Anita, Ana evitó comentarios directos, pero señaló que respeta las decisiones de las personas, incluido él. Afirmó que le quiere mucho y que siempre tendrá las puertas abiertas, al mostrar comprensión hacia sus decisiones.
En relación con su vida sentimental, Ana Obregón descartó la posibilidad de enamorarse nuevamente. Explicó que en este momento se centra en ser madre, padre y abuela, dedicándose por completo a su nieta Anita. Con una sonrisa, expresó que pensar en enamorarse nuevamente le resulta tedioso.
Radiante en un vestido rojo de escote bardot, Ana pronunció un emotivo pregón para los vecinos de Alcobendas. Aunque admitió estar más nerviosa que en las Campanadas de la Puerta del Sol, no dejó de recordar a su hijo Aless en una jornada inolvidable. Sin embargo, la presentadora optó por no abordar la polémica en torno a la Fundación Aless Lequio, al mantener la discreción al respecto. Al abandonar el Ayuntamiento, regresó a casa junto a su nieta Ana Sandra, la “culpable” de su felicidad.