Alejandro Sanz y Candela Márquez ponen fin a su relación entre dudas y distancia

La distancia se hizo evidente y la conversación derivó en una decisión compartida: poner fin a la relación, al menos por ahora, de forma definitiva

La historia de amor entre Alejandro Sanz y Candela Márquez ha llegado a su final tras algo más de un año juntos. Una ruptura que, aunque reciente, venía gestándose desde hace semanas y que se ha hecho visible a través de indirectas en redes sociales, silencios significativos y una distancia emocional que terminó por imponerse. La separación se ha producido pocos días después de que ambos celebraran juntos el cumpleaños del artista, lo que ha sorprendido a parte de su entorno y a sus seguidores.

Indirectas, redes sociales y un desgaste silencioso

Las primeras señales de ruptura no llegaron mediante comunicados oficiales, sino a través de gestos sutiles. Candela Márquez compartió en sus redes fragmentos musicales y publicaciones que muchos interpretaron como mensajes velados, además de dejar de seguir a Alejandro Sanz en Instagram. Algunas de esas imágenes, como la de una manada de ciervos, fueron eliminadas poco después, aunque ya habían despertado especulación.

Alejandro Sanz tampoco permaneció al margen. El cantante publicó una frase en la red social X —“Yo no soy una perla, soy un océano”— que muchos leyeron como una respuesta directa a las indirectas de su expareja. El mensaje fue borrado al poco tiempo, reforzando la idea de que ambos intentaban expresarse sin exponerse demasiado.

Pese al ruido generado, fuentes cercanas a la pareja han insistido en un punto clave: no hubo terceras personas. La ruptura no se habría producido por una infidelidad confirmada, sino por un clima de incomodidad creciente que fue debilitando la relación desde dentro.

Dudas, inseguridades y una decisión definitiva

Según la periodista Leticia Requejo, conocedora de los detalles del entorno de la pareja, la relación estuvo marcada por las inseguridades y los celos de Candela Márquez. El foco de estas dudas se situó en una amiga de Alejandro Sanz, a quien el artista conocía antes del inicio de la relación. Aunque nunca existieron pruebas de una relación sentimental entre ellos, Candela nunca logró sentirse tranquila con esa presencia, según 20 minutos.

La falta de certezas terminó pesando más que los hechos. Candela llegó incluso a contactar con periodistas de distintos países para informarse sobre esa amistad, en un intento de despejar dudas que nunca llegaron a resolverse del todo. Esa tensión se mantuvo de fondo incluso durante la celebración del cumpleaños del cantante, que ambos compartieron con aparente normalidad.

Sin embargo, pocos días después, una discusión marcó el punto de inflexión. Según las fuentes, Alejandro y Candela tenían criterios muy distintos sobre cómo gestionar ciertas situaciones personales y emocionales. La distancia se hizo evidente y la conversación derivó en una decisión compartida: poner fin a la relación, al menos por ahora, de forma definitiva.

La ruptura deja una sensación de historia inconclusa. No hubo escándalos ni traiciones confirmadas, pero sí dudas no resueltas y una falta de equilibrio emocional que terminó por romper el vínculo. A veces, el amor no se acaba por lo que ocurre, sino por lo que no logra aclararse.