El juez a cargo del caso Rubiales tomará declaración a Montse Tomé, seleccionadora femenina de fútbol, como testigo para esclarecer si la no convocatoria de Jennifer Hermoso en dos partidos de España guarda relación con su negativa a firmar un comunicado conjunto con el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales. Este comunicado buscaba calmar la controversia generada por el beso que Rubiales le dio en la boca a Hermoso tras ganar el Mundial en Australia.
La audiencia está programada para las 10.00 horas en el Juzgado Central de Instrucción Número 1, cumpliendo con la solicitud realizada por el exseleccionador masculino Jorge Vilda. El magistrado ha suspendido el plazo de 10 días para formular escritos de acusación hasta que se celebre la testimonial y se permita realizar alegaciones sobre el mantenimiento de la condición de investigado de Jorge Vilda.
La semana pasada, el instructor propuso que Rubiales fuera a juicio al considerar que Hermoso «no consentía» el beso y que actuó de manera «unilateral y sorpresiva». También propuso enjuiciar a Vilda, al director deportivo de la Selección masculina, Albert Luque, y al responsable de marketing de la Federación, Rubén Rivera, por las presiones que ejercieron sobre Hermoso para que grabara un video afirmando que consintió el beso.
El juez afirmó en su auto que «los tres» procesados llevaron a cabo «una acción concertada» para doblegar la voluntad de Hermoso y lograr que admitiera públicamente que consintió el beso.
Cabe señalar que, aunque el instructor investigaba a Rubiales por agresión sexual y coacciones, en su resolución no propuso juzgarlos por esos delitos, indicando que no era necesario que él hiciera una calificación detallada, ya que las acusaciones podrían precisar los delitos en sus escritos correspondientes.