Hoy: 22 de noviembre de 2024
Daniel Sancho, el español de 29 años que se encuentra en prisión provisional desde el pasado 7 de agosto por el asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta, ha proclamado su inocencia, negando cualquier participación en el crimen ocurrido en la isla de Phangan. El hijo de Rodolfo Sancho aseguró durante la vista que la muerte de Edwin fue un resultado accidental y negó la desaparición de su pasaporte.
Sin embargo, en una audiencia ante el tribunal de la isla de Samui, Daniel Sancho admitió su culpabilidad en el descuartizamiento y ocultación del cuerpo del cirujano. Confesó que buscaba poner fin a la relación que mantenían por más de un año, pero Edwin se resistía. Al parecer, Edwin Arrieta habría amenazado a Sancho con divulgar imágenes comprometedoras de carácter sexual que afectarían la carrera profesional del actor Rodolfo Sancho, padre de Daniel.
Daniel Sancho afirmó: “Soy culpable, pero fui utilizado como rehén por Edwin”. Aseguró que Edwin lo obligó a terminar su relación con su novia y a destruir otras conexiones personales, sumiéndolo en la desesperación, según sus declaraciones durante los primeros días de la investigación. Meses después, cambió su versión de los hechos.
En octubre, la fiscalía de Samui informó de que el crimen se cometió con premeditación, tanto en el asesinato como en el descuartizamiento. El informe indicaba que Daniel Sancho mató intencionadamente y con premeditación a Edwin Arrieta, enterró, ocultó, trasladó y destruyó el cadáver.
La defensa del acusado se opone a la idea de premeditación. Un contra informe presentado por el despacho criminológico jurídico sostiene que el cuchillo, la sierra y las bolsas de basura que compró Daniel fueron adquiridos para su trabajo como chef.