El paso de la borrasca Emilia por Tenerife ha provocado un total de 584 incidencias desde su inicio, la mayoría relacionadas con los fuertes vientos que han azotado la isla. Así lo recoge el último balance del Cabildo de Tenerife, elaborado en el marco de la activación del Plan Territorial Insular de Emergencias (PEIN).
Tal y como adelantaban las previsiones meteorológicas, el Teide amaneció este sábado completamente nevado, con un espesor de nieve superior al metro y medio, un registro que no se producía desde 2016. La nieve ha cubierto el Valle de Ucanca y se ha extendido a los montes de Arico, Arafo y Güímar, dejando imágenes poco habituales en la isla.
La presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, ha explicado que, aunque se ha logrado restablecer la “normalidad”, los accesos al Parque Nacional del Teide, así como senderos y pistas forestales, seguirán cerrados por motivos de seguridad. Los equipos de Carreteras trabajan con máquinas quitanieves y mañana se valorará si es posible reabrir los accesos.
Durante el episodio se ha mantenido una coordinación constante entre el CECOPIN y los municipios, con 19 ayuntamientos que activaron sus Planes de Emergencia Municipal. A lo largo de este sábado está prevista una nueva reunión de coordinación en la que se estudiará la desactivación del Plan Insular de Emergencias.
Las incidencias registradas han estado relacionadas principalmente con la caída de árboles, vallas, farolas y mobiliario urbano, así como obstáculos en la red viaria. No se han producido daños personales ni incidencias de gravedad, y los servicios básicos han funcionado con normalidad pese a algunos cortes eléctricos puntuales.
En el apartado meteorológico, la borrasca deja rachas de viento de hasta 159 km/h en Izaña, temperaturas de hasta -4 ºC en el Teide y acumulados de lluvia que superaron los 69 mm en Arico. El Cabildo insiste en mantener las medidas preventivas y pide a la población evitar desplazamientos innecesarios y seguir las indicaciones oficiales mientras continúe activo el PEIN.