Gabriela Guillén ha regresado al plató de ¡De viernes! y lo hace para anunciar su intención de demandar a Bertín Osborne. La modelo acusa al cantante de mantenerse completamente al margen de la vida del hijo que tienen en común, pese a sus intentos durante meses por facilitar un acercamiento.
Sin embargo, nada más empezar la entrevista, Guillén revela un giro inesperado. Explicaba:
«Hoy hemos hablado del asunto que teníamos pendiente de la manutención. No habíamos llegado a ningún acuerdo hasta entonces…»
Una ‘casualidad‘ que llega tras meses en los que, según ella, ha intentado contactar con Osborne sin obtener respuesta. Este distanciamiento contrasta con el posado que el cantante realizó este verano con el niño, una imagen que entonces se interpretó como un signo de entendimiento.
Durante la entrevista, Guillén estalla y afirma que, a día de hoy, no ha recibido ninguna aportación económica de Osborne para la manutención del pequeño. “No se ha llegado a ningún acuerdo y no ha pagado nada. No hay responsabilidad de nada absolutamente”, denuncia. A su juicio, el problema principal es la ‘falta de comunicación’, pues tras el día del famoso posado no ha vuelto a ver al cantante.
Ante esta situación, Antonio Rossi asegura que no se ha alcanzado un acuerdo porque ella modificó las condiciones iniciales. Guillén lo niega y sostiene que el dinero no es el fondo del conflicto. Afirma:
«El hecho de que no se haya firmado el contrato es meramente por falta de comunicación e interés (…) No se ha preocupado en ningún momento por el niño. Yo no tengo que pedir nada, él tiene que darlo»
Lo que más le duele, añade, es la ausencia total de relación paternal:
«Es el derecho que tiene mi hijo. No le he pedido que cambie pañales, que le lleve al colegio, pero simplemente un: ¿Oye estás bien? ¿Necesitas algo? Simplemente una llamada como persona normal es lo que yo esperaría»
Guillén también responde a las declaraciones que Eugenia Osborne realizó recientemente en este mismo programa. La hija del cantante se mostraba dolida por las palabras que la modelo había dedicado a su padre y sostenía que, aunque no la juzgaba por hacer pública la polémica, “sus palabras dieron pie a que la prensa juzgasen a Bertín como padre”. En primer lugar, Guillén aclara que fue ella quien pidió a Bertín que informara a sus hijas de su embarazo antes de que lo supieran por la prensa.
Respecto a la idea de Eugenia de que debe ser su padre quien dé el paso para que ella y sus hermanas conozcan al hijo de Gabriela, la modelo asegura no entender esa postura. Considera que, “como madre”, Eugenia debería mostrar más empatía y “dar el paso por si misma si quisiera hacerlo”.
Tampoco comprende que las hijas de Bertín no hayan querido conocer al niño por temor a generar un conflicto con su padre. “Su padre es independiente. Es una personita que es de tu sangre, si tú realmente lo quieres hacer yo pasaría un poco”, afirma.
Sin embargo, preguntada por si cree que el encuentro podría producirse en el futuro, Guillén insiste en que nunca ha puesto barreras. Concluyó:
«Yo siempre he dado todas facilidades. A mí no me han llamado, saben dónde vivo. No voy a poner ningún tipo de impedimento»