El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reafirmado este domingo su plena confianza en la inocencia del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, investigado por la presunta revelación de secretos de Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. “El Gobierno continúa creyendo en su inocencia, y más aún tras todo lo visto. Insisto, creemos en su inocencia y, tras lo escuchado y visto esta semana, más aún”, declaró en una entrevista concedida a El País y recogida por Europa Press.
Sánchez ha insistido en que “la verdad se acabará imponiendo” y que esa verdad es que “el fiscal general del Estado es inocente”. El jefe del Ejecutivo aseguró que su Gobierno “ha respaldado con argumentos, con razones, a una persona inocente” y expresó su confianza en la justicia. Preguntado por una posible dimisión de García Ortiz, el presidente evitó especular y reiteró que no ve motivos para que deje el cargo mientras no exista una sentencia en su contra.
Durante la entrevista, el líder socialista también reflexionó sobre sus declaraciones del pasado septiembre, cuando afirmó que “hay jueces que hacen política”. En esta ocasión, Sánchez reconoció la necesidad de ser “muy escrupuloso y respetuoso” con los procedimientos judiciales que afectan a familiares y criticó duramente lo que calificó como la “máquina del fango” impulsada, según él, por la derecha y la ultraderecha. “Pseudo sindicatos de ultraderecha como Manos Limpias o Hazte Oír presentan denuncias basadas en recortes, y la oposición las amplifica en los medios”, denunció.
El presidente defendió asimismo su confianza en la justicia en los casos abiertos contra su esposa y su hermano, insistiendo en que “la verdad acabará imponiéndose”. En su opinión, la actual polarización política es “asimétrica” y ha afectado especialmente al PSOE, que, según afirmó, “ha sufrido más ataques a sus sedes que ninguna otra organización”. Sánchez señaló además que el auge de la ultraderecha en España se debe, en parte, al “blanqueamiento político e intelectual” que la derecha tradicional ha hecho de Vox para justificar sus pactos autonómicos y municipales.
En otro plano, Sánchez aprovechó la entrevista para confirmar que se presentará a la reelección en 2027, asegurando que lo hace por “responsabilidad y compromiso con el país”. También defendió la integridad financiera de su partido: “En el PSOE no ha habido financiación irregular. Donde sí la hubo, con sentencia en firme, fue en el Partido Popular”, subrayó.
Por último, el presidente abordó la situación política actual y el bloqueo parlamentario de Junts, descartando la posibilidad de convocar elecciones anticipadas. “No estamos en esa situación. Hemos cumplido con Junts en los temas de su competencia y seguimos trabajando en los que no”, afirmó. Sánchez concluyó que la fragmentación parlamentaria “no es un problema, sino un reto que puede convivir con el buen gobierno”, citando los avances económicos y sociales logrados en los últimos siete años.