El Partido Popular se prepara para una jornada tensa en el Senado. El próximo 30 de octubre, Pedro Sánchez deberá responder ante la llamada comisión Koldo, y el PP ya ha dejado claro por dónde irán sus preguntas. El senador Fernando Martínez-Maíllo adelantó que su grupo centrará el interrogatorio en tres frentes: la supuesta financiación del PSOE, el papel de Begoña Gómez, esposa del presidente, y el conocido caso Delcy, relacionado con la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez.
Según Maíllo, el PP quiere aclarar si el exministro José Luis Ábalos pudo colaborar en una financiación irregular del partido. También buscarán respuestas sobre por qué Sánchez decidió incluir a Ábalos en las listas electorales del PSOE en 2023, dos años después de haberlo cesado. “Hay muchas preguntas que Sánchez nunca ha querido contestar”, afirmó el senador en una entrevista en RNE. “Pero aquí tiene la obligación de comparecer y decir la verdad. Si no lo hace, podría estar cometiendo un delito”, añadió.
El interrogatorio se produce en un clima de alta tensión política. El Gobierno ha criticado que la cita se haya programado justo un día después del funeral de Estado por las víctimas de la DANA. Sin embargo, Maíllo defendió la decisión y acusó a Sánchez de “utilizar” ese acto para intentar victimizarse. Según explicó, las comisiones se celebran todas las semanas, por lo que cualquier fecha habría coincidido con algún otro evento, según Europa Press.
El PP mantiene en secreto quién será el senador encargado de interrogar al presidente. Martínez-Maíllo justificó esta decisión señalando que en anteriores comparecencias algunos miembros del Gobierno trataron de presionar o incluso intimidar a los senadores. “Como cuando el señor Puente dijo que tenía dosieres de todos”, recordó.
Pese a la discreción, todos los integrantes del grupo popular participarán en la elaboración de las preguntas. La estrategia busca mostrar unidad y solidez frente a Sánchez, al que acusan de “ocultar información” y de evitar temas incómodos.
Maíllo también descartó que el presidente pueda ampararse en causas judiciales para no responder. “No está imputado y no tiene motivos para guardar silencio. Hacerlo sería casi una declaración de culpabilidad”, afirmó.
El PP no descarta futuras citaciones, incluso a Begoña Gómez, aunque prefiere ir “paso a paso” y esperar a los nuevos informes de la UCO. Con la comparecencia de Sánchez a la vuelta de la esquina, el Senado se prepara para una sesión que promete ser decisiva en la batalla política entre el Gobierno y la oposición.